El arte como bien social: denuncian el arrojo de deshechos en el campo con una obra hecha de basura

La historia está compuesta por hechos transmitidos de generación en generación, siempre a través de una instancia de comunicación de cualquier índole.

En esta ocasión, el vehículo es el arte y por ello Conclusión conversó con el secretario de la Asociación Civil Productores Unidos de Rafaela, Marcos del Fabro, quien expuso sobre el hecho de arrojar basura de la ciudad al campo y sobre la manera que encontraron de denunciar la situación.

En tal sentido, manifestó: “El campo generalmente tiene una forma de hablar muy entrópica, ¿no? Tranqueras adentro, y cuando sale, sale con toda la bronca. En nuestra zona muy piamontesa, ¿no?”

“Nosotros tenemos nuestra forma de expresión para hacer los reclamos sobre la basura, que es la denuncia, el pedir que nos vengan a limpiar, pero siempre trabajamos sobre la consecuencia”, detalló del Fabro, para enseguida completar: “Dijimos, vamos a atacar el elemento clave, que es la conciencia de la ciudadanía, no a través de un discurso de crítica, sino de reflexión profunda”.

Inmediatamente, continuó: “Entonces lo que hicimos es invitar a una artista plástica que tomara visión de lo que pasa en el periurbano con la basura e hiciera un mensaje, una obra, una pieza que dijera, ‘el campo le devuelve a la ciudad lo que no quiere recibir de ella’”.

Después de explicar que la obra denominada Arrojo “de momento va a ser itinerante”, este medio charló con la artista local Mavi Furlotti, “madre de cuatro hijos” y que en los ratos libres se dedica “a hacer cosas como esta”.

“¿Por qué no transformar, buscar esa cosa que tiene el arte, que hace capaz que todo surge a través de la creatividad y la transformación?”, subrayó, para enseguida añadir que “Arrojo es un tero, porque es muy significativo para el campo, porque cuando fue el momento de la creación, más allá de que hice bocetos, estaba en la presencia de ellos, así que nunca lo pensé como alternativa”.

Furlotti continuó: “Y bueno, ¿por qué no? Si ya que fuimos de a poco interactuando, porque como sabemos bien, el tero es muy protector de los suyos, de su espacio y de su hábitat y salió esta idea”.

“Recorrimos los cuatro puntos cardinales alrededor de la ciudad, y hay mucha diversidad, porque la gente justamente arroja de todo, desde plástico, chapas, elementos de construcción, basura doméstica, animales muertos, bueno, de todo, vidrio, alambres. Y el desafío, hermosísimo y terrible, fue poder conseguir hacer una fusión de todo eso”, describió la artista.

Además, se refirió a su significado: “Es la responsabilidad que tenemos todos, no solamente del que arroja. Lo que hacemos, con lo que tenemos, el compromiso que debemos asumir por esta casa común que es nuestro planeta, que es la casa que le vamos a dejar a los que vienen atrás, que son nuestros hijos, sobrinos, nietos”.

“Me sorprendió tener que llegar a esto, puede ser un canal nuevo como medio de comunicación, porque he escuchado propagandas para que la gente no tire basura, han puesto multas para que no tiren basura, está la GUR cuidando y la basura sigue estando en los caminos, en los potreros rurales”, reveló finalmente.

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