VIERNES, 22 DE NOV

Unión-Tigre se podría jugar a puertas cerradas

Luego de los episodios de violencia y represión que se vivieron ayer en el estadio 15 de Abril, de Santa Fe, el Ministerio de Seguridad santafesino evalúa que el próximo partido del 'Tatengue' sea sin público.

 

El partido entre Unión y Tigre podría jugarse sin público, luego de los disturbios ocurridos ayer en el estadio 15 de Abril en lo que fue empate entre el ‘Tatengue’ y Lanús.

El ministro de Seguridad santafesino, Claudio Brilloni, manifestó que se está evaluando la posibilidad de que el próximo encuentro por la Copa de la Liga sea a puertas cerradas, a raíz de los graves incidentes del domingo y la delicada situación institucional.

En declaraciones radiales, Brilloni sostuvo que «aventurar a día lunes a primera hora una decisión sería un desatino» ya que deben «planificar y hacer las previsiones con todos los sectores que tienen que ver con el partido», pero admitió que están «evaluando eso».

«No lo voy a negar, estamos evaluando la posibilidad de jugar… obviamente de llevar a la mesa de las decisiones la posibilidad que se juegue sin público«, dijo el ministro en diálogo con Radio Universidad.

Los disturbios mencionados se dieron a raíz del enfrentamiento entre un sector del público y efectivos policiales, tanto en la sede del club como en los alrededores del estadio.

El titular de la cartera de Seguridad afirmó que hay policías heridos, como así también simpatizantes, sin que haya habido detenciones.

«Hoy tenemos cinco policías con distintas contusiones, otro con un dedo quebrado, y un niño que al aspirar el gas pimienta cae de boca al piso, se lastimó la cara, tuvo que ser hospitalizado y según el último parte se encuentra bien», detalló el ministro, quien confirmó que no hubo detenciones porque en el momento de los disturbios hubiese implicado «agitar los ánimos», aunque se está trabajando para identificar a los hinchas violentos.

La investigación oficial señala que algunos de estos destrozos fueron causados por integrantes de “La Bomba”, la barra brava del club.

El clima tenso, que incluyó banderas contra el presidente Luis Spahn y la comisión directiva, se debe a que el equipo está comprometido con el descenso. Tras no haber podido ganar ayer, el equipo quedó a 1 punto de quedar en puesto de perder la categoría, pudiendo ser superado hoy por Tigre y su máximo rival, Colón.

Mientras tanto, el ministro afirmó que habrá custodia policial en la sede del club y en los entrenamientos del equipo.

Este episodio se suma a las amenazas que recibió el presidente de Colón, José Vignatti, que atraviesa por la misma delicada situación futbolística e institucional que el ‘Tatengue’.

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