Cada vez más extranjeros eligen Argentina para la observación de aves, y dejan miles de dólares en el país
El país cuenta con una amplia diversidad de aves y ecosistemas propicios para su observación. Crecen los contingentes extranjeros que dejan miles de dólares en el país para realizar la actividad. También aumenta la cantidad de aficionados locales.
Por Guido Brunet
Argentina se consolida como uno de los destinos predilectos para los amantes de la observación de aves, una actividad que posee impactos positivos en la concientización ambiental, las economías locales y el mercado turístico. Es así como turistas de todo el mundo gastan miles de dólares en visitas al país para realizar ornitología. Una jornada de expedición puede llegar a costar hasta 1.000 dólares, y en algunos lugares los tours incluyen varios días de observación.
Para tomar dimensión de la importancia del país en la diversidad de aves, en toda Europa se pueden observar un total de 800 especies de aves, mientras que Argentina cuenta con 1075 especies.
Entre los diversos destinos que Argentina ofrece para esta práctica, los Esteros del Iberá en la provincia de Corrientes se erigen como una auténtica «meca» para el avistamiento de aves. Incluso en una estancia se pueden encontrar más aves que en Inglaterra. Otros de los lugares elegidos por los observadores son la provincia de Misiones, el noroeste (Jujuy, Tucumán) y Patagonia.
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Para conocer más sobre este tema, Conclusión dialogó con Duncan Hogg, un guía de observación de aves que se desempeña en la zona de Capilla del Monte (Córdoba). «Argentina tiene una gran avifauna, una diversidad en la cantidad de aves, y la posibilidad de acceder a ellas, que es privilegiada. El país, además, tiene muy buenas rutas comparado con otros países. He trabajado en países en donde es muy difícil desplazarse o contar con servicios», comenzó detallando el experto.
«Nuestro país cada vez se está posicionando mejor. En Argentina está creciendo mucho, es impresionante la cantidad de aficionados que hay, no es algo popular, pero los que trabajamos en las reservas lo notamos mucho. Está siendo un boom a nivel nacional«, dijo Hogg, aunque aclaró que «es un hobby caro porque se necesitan instrumentos ópticos».
Con respecto a los visitantes extranjeros detalló que, en general, se trata de grupos de más de quince personas que se quedan por diez o doce días. «El mismo grupo hace recorridos en distintas zonas del país, en Patagonia hace observación de ballenas, de ahí van a Misiones o Esteros del Iberá»,contó.
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Aves, fundamentales para el ambiente
Las aves son fundamentales para el entendimiento de los ecosistemas y los fenómenos climatológicos. Cada cambio de hábitos nos alertan de modificaciones en el ambiente. «Tienen comportamientos muy predecibles, uno puede saber en qué fecha van a llegar y en qué fecha se van a ir. Si un ave se corre de su línea migratoria, es un cambio mayúsculo. Eso puede predecir fenómenos climáticos, como tsunamis. La aparición o no de un ave es un mensaje importantísimo a nivel ecológico. Las aves son indicadores de cambios y generadoras de cambios, pueden favorecer a la reforestación, por ejemplo.«, explicó Hogg.
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Por otro lado, el guía destacó a la Argentina como «pionero a nivel mundial» en la creación de Parques Nacionales. «El último parque nacional que se creó que es el parque Ansenuza (Córdoba), practicamente diseñado para la conservación de aves», añadíó.
A su vez, manifestó la necesidad de que la población cuente con mayor información ambiental. «Se dice que uno no puede amar lo que no conoce», cerró el guía de observación de aves.
