Vuelve a los escenarios Bardo Carnal: una obra de hermanas, espías y encierro que juega con lo irracional
La obra –que estrena su séptima temporada– podrá disfrutarse todos los viernes de junio, a las 21, en La Orilla Infinita, el espacio teatral ubicado en Colón al 2148. La presentación está escrita y dirigida por Francisco Fissolo y cuenta con las actuaciones de Sabrina Marinozzi, Luz Battagliotti y Sol García Casanovas.
Tres hermanas encerradas, una misión y un pasado no resuelto que empaña el presente. Todo esto y más será llevado sobre las tablas en “Bardo Carnal”: una obra teatral que busca discutir de “manera irrespetuosa” con la realidad, por fuera de las lógicas racionales.
La función se estrenará este 7 de junio y se repetirá todos los viernes del mes, siempre a las 21, en el teatro La Orilla Infinita, ubicado en Colón al 2148. Las entradas anticipadas pueden comprase de forma virtual.
“Bardo Carnal” presenta la historia de tres hermanas que fueron entregadas por sus padres a los Servicios de Inteligencia. Encerradas en un búnker, las protagonistas de esta historia intentan cumplir una misión comandadas por un oficial de nombre Gutiérrez y un general apodado “Malevo”: deberán descifrar mensajes ocultos enviados desde Alaska por una organización mafiosa que quiere conquistar el norte argentino inundándolo de nieve.
Al adentrarse en la intimidad de los personajes, la obra pone sobre la mesa el daño que produce el desamparo, la acumulación de resentimiento y el pasado no resuelto que infecta al presente. Así las cosas, la única salida parece ser el bardo.
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La obra está escrita y dirigida por Francisco Fissolo y cuenta con las actuaciones de Sabrina Marinozzi, Luz Battagliotti y Sol García Casanovas.
Tanto las actrices como el director confesaron que Bardo Carnal es el “resultado de un año de investigación en un laboratorio de entrenamiento actoral”, y apuntaron: “El proyecto surge desde el deseo de producción colectivo. Nos interesaba probar ciertos procedimientos de actuación entrecruzados con hipótesis de relato”.
Si bien la obra se estrenó en marzo de 2022 y ya lleva siete temporadas, los artistas consideraron que “sigue en total vigencia con las coyunturas que hoy se presentan, tanto por la actualidad de su relato y las preguntas que propone como por la fisicalidad con la que se afirma”.
“Buscamos afirmar una realidad por fuera de cualquier lógica racional. Las hipótesis que nos encontramos ensayando fueron puntuales y reiterativas: el encierro, la burocracia, la identidad, las relaciones familiares, la orfandad, el símbolo patrio”, comentaron.
“Queríamos hacer una obra que discuta de manera irrespetuosa con la realidad. No nos interesó nunca solemnizarnos para quedar bien con nadie, ni hacer una obra que en su ideología termine siendo demagógica. Nos atrajo mucho más la posibilidad y la idea de hacer lío en escena. Que desde la actuación y su relato sea una obra poguera”, añadieron los artistas, quienes destacaron que esta obra les permite “interpelar desde la actuación” la realidad de estos tiempos.
