La sequía se está expandiendo y preocupa al campo: zona núcleo, principal perjudicada
Esta noticia vuelve a encender las alarmas para las siembras de maíz y soja, que podrían verse afectadas negativamente como ocurrió en la campaña 2022/23 debido a "La Niña", donde las producciones de ambos cultivos cayeron 54% y 39%, respectivamente.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó esta semana que la sequía se está expandiendo en la Argentina. «En los últimos meses, se agravó la situación en la zona núcleo», señaló el organismo.
Esta noticia vuelve a encender las alarmas para las siembras de maíz y soja, que podrían verse afectadas negativamente como ocurrió en la campaña 2022/23 debido a «La Niña», donde las producciones de ambos cultivos cayeron 54% y 39%, respectivamente.
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En su pronóstico para el próximo trimestre, el SMN advierte que aumentarán las temperaturas y habrá pocas lluvias.
«El último mes experimentó una rápida transición del frío extremo a temperaturas más templadas, pero las lluvias estuvieron ausentes en casi todo el país y la sequía empieza a preocupar», señala el reporte.
???? La sequía se expande en #Argentina
☁️ En los últimos tres meses, debido a la falta de lluvia, se agravó la situación en la zona núcleo.
???? Este mapa del @crc_sas muestra en tonos rojizos las zonas más afectadas. pic.twitter.com/ZmNlizN5Vz
— SMN Argentina (@SMN_Argentina) July 29, 2024
En ese sentido, el ingeniero Eduardo Sierra, climatólogo, expresó que esta sequía, a diferencia de la anterior, no se producirá por un fenómeno «La Niña», caracterizado por lluvias por debajo del promedio.
«La Niña» está relacionada con la mayor intensidad de los vientos alisios fuertes desde la zona ecuatorial de la costa de Sudamérica hacia Asia, al otro lado del océano.
«Este enfriamiento no es por los vientos alisios fuertes, que sería ‘La Niña’, sino por vientos polares fuertes que están soplando», afirmó Sierra.
Según el experto, se está atravesando un ciclo de años con vientos polares que incluso en verano no dejan entrar la humedad que proviene del Amazonas, fundamental para la actividad agrícola en la Argentina.
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CLIMA DE ÉPOCA
«El epicentro de la sequía de nuestro país con este sistema de los vientos polares es el límite común entre Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires. Ahí tenemos la peor situación y da la impresión que podría estar hasta el verano», expresó Sierra.
«Los vientos polares han llegado para quedarse y estamos volviendo al clima que teníamos hace 50 años, con inviernos gélidos, veranos tórridos y sequías en el interior del país, en áreas que hoy son agrícolas debido al ciclo anterior».