Polémica tras las elecciones en Venezuela y recrudecimiento de la situación en Medio Oriente
En la tradicional mesa de los miércoles de Café Internacional se trató de forma excluyente el tema más importante de la semana: las elecciones en Venezuela, en las que fue designado como ganador el presidente Nicolás Maduro (51,4% de los votos) frente al contrincante de la Plataforma de Unidad Democrática, Edmundo González (41% de los sufragios). Por otro lado, se adelantó un breve análisis de los últimos acontecimientos en Medio Oriente, jalonados por los ataques selectivos de Israel a altos dirigentes de Hamas, Hezbollah y la Guardia Revolucionaria Iraní, y a una nueva escalada de tensiones entre el país hebreo y su principal rival regional, Irán.
Luego de un clima preelectoral en el que las señales hacia afuera en términos de posibles resultados eran mixtos, pero con encuestas vaticinando un triunfo contundente de Edmundo González Urrutia, el anuncio por parte del Consejo Nacional Electoral consagrando la victoria de Nicolás Maduro terminó generando el escenario que todos temían: la prolongación de la guerra de desgaste entre el chavismo y una oposición unificada y competitiva electoralmente. Si las negociaciones entre el gobierno venezolano y otros actores influyentes como Estados Unidos habían conseguido crear un panorama claro hasta el 28/7 y hasta se había abordado el tema de una transición pacífica de poder, con el reconocimiento mutuo entre oficialismo y oposición, la contestación a los resultados dados a conocer públicamente convirtió en papel mojado todo lo negociado con anterioridad. Todo esto creó un clima de tensión a nivel interno, con fuertes manifestaciones a nivel nacional, que pone a los principales actores internos y externos en una carrera contra el reloj para reconducir el proceso político.
En el centro de los reclamos está la demanda tanto por parte de la oposición como de otros actores interesados, entre los cuales destacan Brasil y Estados Unidos, de que el gobierno haga públicas las actas electorales que consignarían la victoria del oficialismo, lo que hasta ahora no ha sucedido. Desde el programa se analizaron varios factores que han llevado a este escenario: las diferentes narrativas del oficialismo y la oposición, las posibilidades de éxito del diálogo político impulsado por el presidente brasileño Lula Da Silva, las posibles motivaciones y objetivos de Maduro, o la situación política del oficialismo y la oposición en el marco electoral, así como también las posibles consecuencias de este nuevo capítulo de la crisis política venezolana, que promete extenderse en el tiempo.
Si bien Venezuela abarcó la casi totalidad del análisis, desde la mesa de conducción hubo tiempo para introducir un tema que tiene también puntos suspensivos en su desarrollo: el recrudecimiento de la crisis en la frontera norte entre Israel y el grupo islamista Hezbollah, que involucró bombardeos masivos de este último hacia territorio israelí, y la represalia selectiva del gobierno de Benjamín Netanyahu, con el abatimiento de diversos líderes políticos tanto de Hezbollah como del grupo palestino Hamas, e incluso altos cargos de la Guardia Revolucionaria Iraní. Estos ataques tuvieron lugar en Beirut, en Damasco y en Teherán, y entre las principales figuras asesinadas se encuentra la del líder máximo de Hamas, Ismail Haniyeh, ultimado mientras asistía a la asunción del presidente iraní Masud Pezeshkian. Esto ha elevado la disputa entre Irán e Israel, incluso con amenazas de Teherán de tomar represalias que involucrarían un nuevo ataque a territorio israelí. Una situación que escala conforme pasan los días, que augura una extensión del conflicto entre Israel y Hamas, y que deja las negociaciones por el cese al fuego y la liberación de los rehenes israelíes al borde del colapso.