Noche de los Lápices: a 48 años de la masacre, estudiantes y docentes marcharon en defensa de la educación y la memoria
Cientos de alumnos tanto secundarios como universitarios participaron de una movilización en defensa de los derechos humanos y por mayor presupuesto educativo.
- Ciudad
- Por Manuel Parola
- Sep 16, 2024
Los estudiantes de Rosario volvieron a alzar sus lápices este lunes como cada año en la emblemática marcha de La Noche de los Lápices, a 48 años del operativo nocturno que secuestró y desapareció a diez adolescentes que militaban en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) de La Plata en la última dictadura militar.
Miles de estudiantes secundarios y universitarios y sus respectivos docentes marcharon junto a organizaciones sociales y políticas, centros de estudiantes y políticas y organismos de derechos humanos desde la plaza San Martín para exigir que el presidente no vete la ley de financiamiento educativo, que tuvo sanción definitiva en el Senado el pasado viernes, y volver a reclamar por la continuidad de las políticas de Memoria.
Las columnas comenzaron a concentrarse en Santa Fe y Córdoba entre las 14.30 y las 15.30 para marchar por ésta última traza hasta Bulevar Oroño y pasar frente a las puertas de los Tribunales Federales, donde se tramitan los juicios de lesa humanidad que tienen lugar en la circunscripción rosarina. Acto seguido, la caravana que llegó a ocupar varias cuadras del microcentro siguió su camino por calle San Luis hasta Buenos Aires, para así marchar hasta el Monumento Nacional a la Bandera.
Los varios miles de jóvenes que poblaban el grueso de las columnas saltaban y cantaban a los gritos canciones contra el gobierno nacional y recordando a los más de 30 mil detenidos desaparecidos entre 1975 y 1984, cargando coloridas banderas y carteles con consignas por la defensa de los derechos humanos, de la Ley de Financiamiento Universitario dado el “VETO TOTAL” anunciado por el presidente Javier Milei y el aumento del presupuesto para Educación y transporte y en protesta de la baja de edad de punibilidad.
«Los reclamos de aquellos compañeros y compañeras siguen teniendo mucha actualidad», sostuvo a Conclusión militante de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) Lautaro Ruiz y «hoy más que nunca, dado el contexto que atraviesa el país en el cual la fragmentación social que se pretende imponer a partir de pauperización de condiciones económicas, sociales y laborales y la inyección del desánimo. La actualidad que tiene la marcha tiene que ver con enhebrar el movimiento estudiantil y el movimiento obrero y el conjunto de la sociedad ya que nadie se salva solo«.
La movilización tuvo lugar pocas horas después de que el jefe de Estado ingresó el pasado domingo por la noche un proyecto de ley de presupuesto para el periodo 2025 donde se recorta la inversión en ciencia y tecnología en 33,5% mientras que la educación padecerá un ajuste del 45,1% respecto de 2023. Cabe mencionar que la gestión de Milei prorrogó el Presupuesto del año pasado, por lo que todas las dependencias y áreas del Estado funcionaron con una función pensaba en noviembre de 2022 y habiendo atravesado un periodo económico que concentró un crecimiento del 254,2% del índice de precios al consumidor (IPC), dejando todos los fondos más que atrasados y sin capacidad de administración práctica.
«Siempre hay que tener memoria, por eso está bueno marchar ahora que estamos atravesando una situación muy parecida de represión y recorte a la educación en el gobierno de Javier Milei», dijo Juan, el estudiante de primer año de la escuela secundaria Gurruchaga, quien marchó por primera vez en un 16 de septiembre, en diálogo con Conclusión.
El adolescente de 13 años apuntó que en su curso «no marchan mucho» pero que sin embargo «en los recreos se habla bastante de este tema. No vinimos muchos de mi escuela pero los que no vinieron no fue porque no querían sino porque no los dejaban o en la casa no los dejaban marchar solos con su Centro de Estudiantes». Sin embargo, los centros de estudiantes secundarios fueron de las columnas más nutridas de la populosa marcha, a contrapelo de lo que se dice frecuentemente de la preferencia de los jóvenes por Javier Milei y su apologismo del terrorismo de Estado: “Me gusta la idea de venir entre todos a luchar por ellos (los estudiantes desaparecidos en 1976) y por los derechos que nos están arrebatando”, declaró el estudiante.
Secuestro en dictadura
La noche del 16 de septiembre de 1976 se produjo un operativo militar en el que efectivos de la Policía bonaerense y del Ejército irrumpió en las casas de diez estudiantes de la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) de La Plata que habían organizado una manifestación en reclamo por el boleto estudiantil secundario en la ciudad de La Plata.
El operativo, que estuvo comandado por Ramón Camps y Miguel Etchecolatz. De esos jóvenes, sólo cuatro, Gustavo Calotti, Pablo Díaz, Patricia Miranda y Emilce Moler, lograron sobrevivir, mientras que los restantes seis continúan desaparecidos: María Claudia Falcone, María Clara Ciochini, Horacio Ungaro, Claudio de Acha, Daniel Racero y Francisco Muntaner.