Ante la pérdida de 30 mil empleos, la UIA advirtió el peligro de una apertura indiscriminada de las importaciones
La central fabril presentó su informe Costo argentino, “elementos clave para lograr competitividad”, donde se analiza en detalle cómo la industria enfrenta altos costos de producción que limitan su capacidad de competir frente al mercado internacional.
La Junta Directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) advirtió que no se puede abrir el comercio internacional sin igualar las condiciones para las industrias nacionales y de esta manera evitar seguir perdiendo empleos.
Además, dijo que la carga fiscal y la falta de infraestructura son las principales barreras contra la competencia. La UIA pidió avanzar en una agenda de mejora de la competitividad y desarrollo industrial del país, en paralelo a las medidas de apertura del comercio internacional.
Durante la extensa reunión, los representantes sectoriales y regionales analizaron el impacto de las medidas anunciadas con relación a la importación. Al respecto, resaltaron que la apertura al comercio internacional debe desarrollarse conjuntamente con una agenda concreta para mejorar la competitividad y bajar el costo argentino.
Las autoridades del sector coincidieron en que si no se resuelven los problemas de competitividad del país, desde la baja de impuestos, las mejoras en infraestructura y conectividad, la promoción de inversiones nacionales y la modernización de los regímenes laborales, avanzar solo con políticas de apertura comercial está teniendo consecuencias negativas, especialmente a las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMES), y también en el empleo donde se perdieron más de 30 mil puestos de trabajo industriales desde agosto del 2023.
Las propuestas de la UIA para la mejora de la competitividad de las industrias nacionales, junto con el diagnóstico sobre la situación actual, pueden verse en el informe “Costo argentino: elementos clave para lograr competitividad”. El estudio muestra que la industria argentina tiene una productividad que se encuentra por encima del promedio de América Latina pero en términos de competitividad el país ocupa el puesto 66 de 67 países.
El análisis también abordó la creciente judicialización en el ámbito laboral. Según datos de octubre, se registraron 11.851 nuevos juicios relacionados con accidentes de trabajo, acumulando 105.960 casos en lo que va del año, un 14,3% más que en octubre de 2023. Aunque los índices de siniestralidad están en mínimos históricos gracias a los esfuerzos preventivos, los litigios han aumentado un 25%, afectando negativamente los costos de producción”.
«Sin resolver estas cuestiones estructurales, las políticas de apertura comercial seguirán impactando negativamente en las cadenas de valor, el empleo y la actividad industrial», manifestaron desde la Junta Directiva.