Ocho de cada diez franceses no quiere que Sarkozy vuelva a ser presidente
Un día después de anunciar su voluntad de volver a competir en las elecciones del año próximo, un sondeo difundido muestra el rechazo de la población.
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- Ago 23, 2016
Un día después de anunciar su voluntad de volver a competir por la Presidencia de Francia en las elecciones del año próximo, un sondeo difundido hoy mostró que casi el 80 por ciento de los franceses rechazan la posibilidad de que Nicolas Sarkozy vuelva al Palacio del Elíseo.
Según los resultados de una encuesta elaborada por el instituto Elabe y publicada hoy para la cadena BFM TV, a partir de la opinión de 1.000 personas, el 79 por ciento de los franceses se opone a un nuevo mandato de Sarkozy.
El ex presidente francés, que fue derrotado en 2012 por el actual mandatario socialista Francois Hollande, anunció ayer a través de su cuenta oficial en Twitter su intención de competir en las elecciones presidenciales del 23 de abril de 2017, para lo cual deberá dejar la presidencia del partido Los Republicanos para medirse con su potenciales rivales internos.
«He decidido ser candidato a la elección presidencial de 2017. Francia exige darlo todo. Sentí que tenía la fuerza para luchar esta batalla en un momento tan tormentoso de nuestro historia» escribió el líder conservador en un posteo en el que difundió la portada de su nuevo libro titulado Todo por Francia (Tout pour la France).
En medios franceses se difundió hoy un anticipo de la publicación, considerada el marco programático de un eventual gobierno, en la que Sarkozy se compromete a introducir modificaciones en las leyes y tratados internacionales relacionados a la libre circulación en Europa.
En este sentido, menciona su intención de «reducir drásticamente» el número de inmigrantes que entran cada año a Francia y reformar el acuerdo de libre circulación de personas por países de Europa firmado por 26 naciones, para hacerlo exclusivo para los comunitarios, informó la agencia de noticias EFE.
El presidente de Los Republicanos indica también en su nuevo libro la necesidad de «organizar el islam» en Francia, a partir de una fuerte intervención del Ministerio de Interior que será la autoridad que habilite a los imanes, garantice un formación religiosa «estrictamente regulada», que incluiría que la condición que hablen francés y conozcan «las grandes reglas» republicanas.
Además, el flamante candidato, buscará restablecer un servicio militar obligatorio para los jóvenes de 18 a 25 años que ni estudien ni trabajen, los llamados «ni ni».
El anuncio de la postulación generó un cimbronazo político en Francia, incluso dentro del partido de Sarkozy, Los Republicanos, cuyas autoridades le exigieron que renuncie a la presidencia partidaria para poder competir en igualdad de condiciones con sus rivales internos.
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