Turquía ataca a milicias kurdas en Siria en operación contra el Estado Islámico
La artillería turca disparó contra las posiciones ya que acusan a los kurdos de no respetar un acuerdo con Estados Unidos de no traspasar determinadas líneas.
- Internacionales
- Ago 25, 2016
La artillería turca disparó este jueves contra milicias kurdas en el norte de Siria, en el segundo día de una ofensiva en el país fronterizo contra el grupo Estado Islámico (EI), acusando a los kurdos de no respetar un acuerdo con Estados Unidos de no traspasar determinadas líneas.
Ankara envió este jueves un nuevo convoy de blindados a territorios del norte de Siria, al día siguiente del comienzo de una ofensiva relámpago, bautizada como «Escudo del Éufrates», con la que lograron expulsar al grupo EI de la localidad de Jarablos, en el lado sirio de la frontera.
La intervención turca apuntala a las tropas de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza de milicias rebeldes de mayoría árabe.
La artillería turca disparó contra posiciones del Partido de Unión Democrática (PYD), un grupo kurdo que opera en el norte de Siria, y que cuenta con apoyo estadounidense, después de que estos violaron un acuerdo con Washington de no traspasar un cierto punto, informó la agencia estatal Anadolu.
Durante la operación, la más ambiciosa lanzada por Turquía en los cinco años y medio del conflicto en Siria, fueron desplegadas fuerzas especiales en tierra mientras la aviación disparaba contra objetivos del EI.
Los tanques se sumaron a los que ya cruzaron la frontera el miércoles con el objetivo de expulsar de su frontera con Siria al EI y frenar el avance de los kurdos.
Los rebeldes apoyados por Ankara aseguraron que el grupo EI se había retirado más al sur, a la ciudad de Al Bab.
Diez tanques, diez vehículos blindados de transporte de tropas, con ambulancias, además de maquinaria pesada cruzaron la frontera a la altura de la localidad turca de Karkamis.
En la zona se escuchaban esporádicamente ráfagas y explosiones, constató un fotógrafo de la AFP.
Con esta operación Ankara responde al atentado atribuido al EI que dejó 54 civiles muertos en Gaziantep, en el sur de Turquía el sábado pasado.
Dos años de preparación
Turquía, que sufrió varios atentados del grupo yihadista desde 2015 había recibido críticas de hacer la vista gorda a la organización.
El gobierno había «trabajado para hacer una incursión terrestre desde hace dos años», pero había retrasado la operación por varios factores, dijo un alto cargo turco que pidió no ser identificado.
El funcionario citó la reticencia dentro del ejército turco, el débil apoyo de Washington a una misión de este tipo y el incidente aéreo con Rusia, que provocó una crisis entre ambos por el derribo de un aparato de Moscú.
Además de expulsar al EI, el presidente Recep Tayyip Erdogan han insistido en que la ofensiva pretende hacer retroceder a las Unidades de Protección Populares (YPG), otra milicia kurda de la zona, que considera que es un grupo «terrorista» que busca la independencia de la región kurda siria.
Turquía, en permanente conflicto con los kurdos en su territorio, ve con preocupación la idea de que los kurdos sirios formen una cintura de territorios en la frontera.
La línea del Éufrates
La hostilidad de Ankara hacia las YPG la ha enfrentado a su aliado en la OTAN, Estados Unidos, que trabaja con el grupo en el terreno en su combate contra el EI.
Pese ello, el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, de visita en Turquía el miércoles, quiso dejar claro que Washington ha ordenado a las milicias kurdas no traspasar el Éufrates.
El jueves, el ministro turco de Defensa, Fikri Isik, insistió en que «Turquía tiene todo el derecho a intervenir» si las fuerzas kurdas no se retiran rápidamente al este del río.
La eficiencia de la operación también supone un golpe de efecto para la reputación del ejército turco, en horas bajas tras el intento de golpe en julio y la consiguiente purga masiva en sus fuerzas, que se ha saldado con el despido y encarcelamiento de miles de militares.
La rapidez de la operación ha sorprendido a expertos, dado que a los kurdos les tomó tiempo y muchas fuerzas arrebatarle al EI localidades del norte de Siria como Kobane o Manbij.
Estados Unidos asiste a la operación turca en el otro lado de la frontera siria, para forzar la retirada del EI, indicaron fuentes estadounidenses de alto nivel, que pidieron no ser identificadas.
«Los turcos están dispuestos a quedarse lo que haga falta (en Siria) para neutralizar al EI», dijo Biden desde Estocolmo, que celebró que haya un cambio gradual de mentalidad de Ankara con respecto a la organización.
El ejército turco no lamentó ninguna pérdida, dijo Isik, que informó que dos rebeldes murieron y otros dos resultaron heridos.
Citando a fuentes militares, el Hurriyet Daily dijo que un centenar de yihadistas perdieron la vida.
Rebeldes sirios apoyados por Turquía tomaron Jarablos al Estado Islámico