Hoy se cumple un año de la muerte de Adrián Rodríguez, bajista de Raras Bestias
Será recordado con un festival este jueves desde las 17 en frente de la Municipalidad, del que participarán reconocidos artistas, amigos y familiares y en reclamo por justicia y mejores condiciones laborales para los músicos.
- Ciudad
- Oct 12, 2016
Por Santiago Fraga
Muchas veces, y en muchos lados, pareciera que se suele esperar a que ocurran tragedias para cambiar las cosas que de cuajo funcionan mal; pero también hay veces en donde ni eso parece ser suficiente.
Este miércoles 12 de octubre se cumple un año de la muerte del bajista Adrián Rodríguez, de 30 años, cuando recibió una descarga eléctrica mientras tocaba con su grupo Raras Bestias en el clausurado Café de la Flor. Este jueves 13 a las 17 tendrá lugar un festival con reconocidos artistas, donde sus familiares y amigos reclamarán una vez más que haya justicia y porque desde entonces no han habido cambios en las condiciones laborales para los músicos en la ciudad.
“Esto no es algo que afecta sólo a los músicos ni al rock, sino a toda la sociedad en sí, porque esto puede pasar en cualquier lado: en un cine, en un teatro, en un restaurant”, aseguró a Conclusión el saxofonista de la banda, Sebastián Mauro, en una charla donde repartió responsabilidades y habló sobre Adrián, una persona con proyectos de solidaridad y mucho rock.
*Aclaración: el evento estaba pautado para este mismo miércoles a las 17, pero por razones climáticas y de seguridad se pasó para el jueves 13 a la misma hora y en el mismo lugar.
El festival
Este jueves desde las 17 y hasta las 22 se estará llevando a cabo en frente de la Municipalidad (Córdoba y Buenos Aires) un acto recital bajo la consigna del pedido de justicia por la muerte de Adrián Rodríguez, la prisión efectiva para los acusados, la exigencia de mejores condiciones laborales para los músicos y el repudio al ascenso del inspector investigado en la causa, Pablo Akerman.
Del mismo se harán presentes personalidades como ‘Popono’ de Los Vándalos, Pablo Pino de Cielo Razzo, Marcos Migoni de Farolitos, Pancho Chévez y Franz Funes de Patagonia Revelde, entre otros músicos que conforman un total de entre 13 y 15 bandas que pasarán por el escenario.
“Sabemos que hay muy pocos espacios en Rosario para que las bandas que recién empiezan y las del circuito under puedan mostrar su música, y que aparte no están en condiciones para habitar ciertos espectáculos. Pedimos que se controle, porque si pasó en el Café de la Flor tranquilamente puede ser que no se estén controlando los lugares que quedan; los pocos que hay donde hay bandas y demás no sabemos en qué condiciones están”, sostuvo Mauro sobre las mejores condiciones laborales.
Pablo Akerman
El aún reciente ascenso a coordinador de la Dirección de Habilitaciones del inspector investigado en la causa, y a quien se apunta como uno de los máximos responsables, generó el fuerte repudio de los familiares, amigos y hasta del Concejo Municipal.
“Pablo Akerman fue quien firmó esos papeles para la habilitación y lo ascendieron como jefe de todos los inspectores. Es el que tiene la última palabra con las habilitaciones en Rosario, y no sólo los lugares de música. Por eso siempre decimos que esto no es algo que afecta sólo a los músicos ni al rock, sino a toda la sociedad en sí, porque esto puede pasar en cualquier lado: en un cine, en un teatro, en un restaurant. Cualquier local que tenga que estar habilitado por la Municipalidad corre riesgo de que vuelva a pasar lo mismo. Están habilitados, pero no sabemos si están controlados como debe ser”, dijo el saxofonista de Raras Bestias.
Para Mauro, los responsables directos son el dueño, Ariel Scharf, el inspector, Akerman, y el electricista, Fernando Campodónico, que son los tres que están imputados en la causa.
No hubo cambios
Al ser consultado, Sebastián Mauro aseguró que han preguntado en varios lugares y no vieron ningún cambio visible, además de criticar que desde la Municipalidad tampoco se otorga información al respecto.
En este sentido, también expresó: “Pedimos que los músicos se comprometan ellos mismos a que cuando vayan a un lugar exigir que las condiciones. Más allá de que no le corresponde a uno porque sólo debe tocar y no tener porqué pensar en las instalaciones eléctricas, porque para eso hay un inspector que cobra un muy buen sueldo y que es el encargado de darnos seguridad a todos: los que tocamos, el público y los empleados del bar. Pero a los músicos “les pedimos que se fijen bien, y si tienen que cancelar un show que lo hagan porque una vida vale mucho más que un show de una hora y media”.
Una bomba que se fue pasando de mano en mano
Famosa es una frase dicha por Carlos ‘el Indio’ Solari al referirse a la tragedia de Cromañón, asegurando la misma, por las condiciones de los boliches, “fue una bomba que los músicos se pasaron de mano en mano y le explotó a Callejeros”.
En cierta forma y en menor escala, lo que pasó en el Café de la Flor fue la misma situación: “Siempre decimos lo mismo. A veces lo hablamos entre nosotros, de decir si es una cuestión del destino que nos tocó, pero si no nos tocaba a nosotros le tocaba a la banda que seguía, y si no era ese día iba a ser el próximo show. Aquel fue un fin de semana largo y nos tocó de tocar un domingo, y ya todo ese fin de semana había bandas que habían tocado y habían tenido problemas con la electricidad. El día anterior habían tenido que suspender un show a la segunda o tercer banda y todos se fueron porque no se podía tocar. Al día siguiente obviamente nosotros no sabíamos nada, y fuimos con tres bandas más. Si fue una bomba que nos fuimos pasando entre todos los músicos que fueron tocando en ese lugar es porque nadie dijo nada tampoco de los problemas anteriores. Esas cosas hasta que no pasan lamentablemente nadie hace eco de nada, y hubiera estado bueno que los músicos que tocaron los días anteriores denuncien realmente eso”.
Aquel día iba a ser el último que tocara Raras Bestias en un bar, antes de pasar a un club. “Era para juntar un poco más de plata y cubrir todos los gastos”, lamentó Mauro.
Volver más fuertes
“Desde un primer momento la familia de Adrián, el padre, nos pidió que siguiéramos tocando, que no bajemos los brazos, que eso es lo que Adrián hubiera querido”, contó Sebastián Mauro a Conclusión.
Uno de sus sueños que Rodríguez tenía era que la banda empiece a independizarse un poco, dejando de “llenar algunos bolsillos” y empezando a tocar en clubes haciendo movidas propias.
El primer ensayo fue complicado y un momento muy duro. También fue difícil pasar por las condenas, la fiscal y toda la información que aún positiva genera recuerdos y una triste nostalgia. Ahora, el 19 de noviembre se volverán a presentar en vivo, y tienen intenciones de grabar un disco en 2017.
Adrián
“A Adrián siempre lo recordamos con una sonrisa. Con un chiste. Él y Joel, el cantante, fueron los que empezaron con este proyecto. La banda siempre tuvo su impronta. Era una persona muy agradable, de tirar un chiste atrás del otro, que siempre se hacía querer. Era de esos tipos que vos sabés que te podés hacer amigo tranquilamente. Era uno de los que empujaba la banda, que le daba difusión a todo lo que hacíamos, y quien tuvo esta idea de empezar a tocar más en clubes de barrio. Todo lo que hacemos como banda lo hacemos siempre pensando en lo que él decía y en las ideas que él tiraba”.
19 de noviembre, el regreso
El 19 de noviembre, Raras Bestias cumplirá la cuenta pendiente y tocará en el club Amistad y Juventud (Ecuador y Zuviria), siendo un proyecto que venía de Adrián Rodríguez, que para ellos que fue uno de los que “inició la idea de tocar en los clubes de barrio para fomentar la actividad en esos clubes, que la gente del barrio se sume, y juntar alimentos no perecederos para entregar a los comedores y copas de leche”.
“Todo eso que era algo que lo generó Adrián lo seguimos nosotros, y eso es algo que te entusiasma y que aunque más allá de que no esté más físicamente seguimos con la idea que él tenía”, cerró Mauro.