Narcolemia: “Resultados de los estudios tienen casi un 100% de efectividad”
Este jueves comienzan en Rosario los controles sobre los conductores para detectar la presencia de sustancias ilegales. Conclusión dialogó con el bioquímico Daniel Ezpeleta, quien ratificó la eficacia de la prueba.
- Ciudad
- Ene 19, 2017
Por Alejandra Ojeda Garnero
En cumplimiento de la Ordenanza Nº 9195/14 aprobada en 2016 por el Concejo Municipal, hoy comenzará a implementarse el control de Narcolemia que consiste en detectar la presencia de sustancias ilegales en los conductores y de esta manera prevenir resultados desagradables en relación a accidentes de tránsito, que es la mayor causa de muerte en Rosario.
Conclusión consultó al bioquímico y especialista en toxicología Daniel Ezpeleta, quien manifestó que “me parece bien todo lo que sea el control de este tipo de usos indebido de sustancias y desde el punto de vista de lo que producen en el individuo, es mejor aún que se pueda controlar”.
Sin embargo, expresó que a pesar la que la medida está bien en cuanto al control, “después hay que estudiar bien la implementación, habrá muchas discusiones al respecto, de cómo se hace la contraprueba, lo que puede decir la persona involucrada. Eso forma parte de una logística jurídica pero en realidad, desde el punto de vista estrictamente toxicológico y de control médico es una buena medida”, ratificó.
En relación a la efectividad de éstos métodos de control, el especialista opinó que “son efectivos estos métodos de control porque los aparatos en general son muy buenos. No se lanzan al mercado si tienen alguna falla”.
La reglamentación indica que los exámenes se realizarán con la presencia de un médico, que en primera instancia hará un examen clínico visual y dependiendo de este resultado se procederá a realizar la prueba. Al respecto, el médico indicó que “es posible que un médico con un solo examen visual pueda detectar si una persona consumió o no alguna sustancia”, de todas maneras aclaró que “eso depende de la especialidad del médico, si va a un médico pediatra, es probable que no funcione, pero si va a un toxicólogo puede dar un diagnóstico más acertado, depende de la calidad de la especialidad del médico “.
En el mismo sentido remarcó que “a veces un médico no necesita la prueba para saber que una persona está alcoholizada o que consumió sustancias, porque siempre el paciente presenta alguna manifestación clínica”, es decir que el examen clínico visual de un médico especialista puede determinar si la persona consumió o no alguna sustancia, con esa confirmación se realizará entonces la prueba concreta.
“Todo proceso de control se realiza a través de un análisis y el médico tiene que estar presente, porque el análisis sólo es muy difícil que diga algo, mientras que el médico actuando sobre el paciente tiene otra visión”, argumentó.
En relación a la efectividad de los aparatos con los cuales se realizarán los estudios, el médico señaló que “son muy buenos, son muy eficaces, cada vez hay menos posibilidad de equivocarse, es decir que habría casi un 100 por ciento de efectividad en los resultados”.
Sin embargo, aclaró que “de todas maneras existe el derecho del individuo de defenderse, si bien la ordenanza no menciona con gran claridad cómo será el tema logístico con respecto a la contraprueba, la persona debe saber que tiene derecho a defenderse”.
Con respecto a mediciones que realiza el aparato, Ezpeleta explicó que “detecta la sustancia, no la cantidad. De todas maneras desde el punto de vista de la toxicología y del cambio de conducta, no cambia demasiado. La cantidad es pocas veces importante en estos casos, en este tipo de sustancia cuando hay una sobredosis no importa si el resultado es 100 o 200. Pueden ser importantes en algún caso en particular pero en este tema puntual de la conducción de vehículos, no. Porque si el individuo está bajo el efecto de alguna de estas sustancias, es suficiente, porque en definitiva para eso la consumió, para modificar su comportamiento, ese objetivo ya está logrado. Si el resultado es el doble o el triple no hace demasiada diferencia”, explicó.
Por otra parte, añadió que existe también otra veta que tiene que ver con “el punto de vista punible y en este caso lo importante no es si tiene 2 o 10 sino que no conduzca bajo los efectos de estas sustancias, hasta ahí llega este control”, señaló desde su punto de vista.
Si bien el dispositivo puede detectar otras sustancias, en este caso se centró la prueba en la búsqueda de cocaína y marihuana. La respuesta del especialista en relación a esta selección indicó que “tiene la posibilidad de detectar algunas drogas más, pero lo que ocurre es que cuando se agregan más sustancias la detección se hace más costosa y con un altísimo porcentaje de los consumidores consumen estas dos sustancias empieza por medir estas dos”.
En cuanto a los efectos que producen la cocaína y la marihuana en los conductores, indicó que “no son totalmente iguales en la cocaína que en la marihuana, pero lo que se busca en principio, con el consumo, es modificar la actitud, la persona, la conducta en el sentido de hacerla más valiente, más agresiva, fuera de la naturalidad. Eso es lo que busca el consumidor, salirse de la normalidad y tener algún tipo de protagonismo en algún tipo de situaciones. Estas sustancias dan esa posibilidad. También tiene otras consecuencias, que el paciente consume después se deprime, una serie de cuestiones al margen de los daños que puede producir el consumo crónico y cotidiano produce daños de todo tipo”.
Puntualizando sobre el examen de narcolemia, el profesional indicó que “en este tipo de examen tiene importancia el tiempo que haya transcurrido entre el momento que la persona consumió la sustancia y el tiempo y el momento en el que se practica en la prueba”, y al respecto agregó que “como se produce en las pruebas de alcoholemia, pasado un determinado tiempo la medición baja. Pero en el caso de las sustancias no es igual. Ya que en este tipo de sustancias hay que tener en cuenta que el tiempo transcurrido no es tan pronunciado como en el tema del alcohol”.
En el caso de la cocaína y marihuana “tienen una característica que se denomina en medicina, vida media. Esto mide en cuánto tiempo la dosis baja a la mitad y en estos sistemas (de las drogas) la vida media es más prolongada que la del alcohol. Puede aparecer después de las 8 horas de consumo, durante 12 horas y depende también el consumo puede aparecer hasta las 24 horas”.
En los casos en que aparece luego de las 24 horas de haberla consumido, sí es importante la cantidad, porque va a significar que consumió mucha más cantidad que la detectada.
Para finalizar, el especialista reflexionó sobre la medida e indicó que “me parece bien que se hagan esto controles de una manera categórica, que pueda ser comprobable y que de alguna manera no tenga otras connotaciones, ni recaudatorias, ni de campañas políticas, ni de complicaciones para la gente común, que sea una prueba que no sea molesta, que sea igual para todos y que no tenga intenciones de juntar dinero sino de una implementación para tomarlo como una medida de salud pública”.
Presentaron el dispositivo que se utilizará en los controles de narcolemia
«Era imprescindible que se estableciera en Rosario el control de Narcolemia»
Daniel Ezpeleta. Bioquímico. Docente en la Facultad de Ciencias Médicas de la UNR. Mat. 649