Comenzó juicio oral y público por violencia de género
El imputado es juzgado por el delito de tentativa de homicidio calificado de su ex pareja. El juicio comenzó ayer y está previsto que se extienda hasta este jueves. El fiscal Norberto Ríos investigó el caso.
Un hombre de 45 años –cuyas iniciales son MGV– comenzó a ser juzgado el pasado lunes por violencia de género en el marco de un juicio oral y público que se desarrolla en Las Toscas. El tribunal está integrado por los jueces Jorge Galbusera, Gonzalo Basualdo y Gustavo Gon.
El fiscal que investigó el caso es Norberto Ríos; en tanto, el Centro de Asistencia Judicial se constituyó en querellante.
Los delitos por los que se juzga al imputado son tentativa de homicidio doblemente calificado –por haber mantenido una relación de pareja con la víctima y por violencia de género–; violación de domicilio y amenazas; todo en concurso real.
Este lunes se realizaron los alegatos de apertura y está previsto que las audiencias se realicen hasta el jueves de esta semana. Por su parte, la sentencia se daría a conocer el jueves 2 de marzo.
Los hechos
MGV es juzgado por lo ocurrido el domingo 17 de enero del año pasado en una vivienda del barrio Fonavi de la ciudad de Villa Ocampo, departamento General Obligado.
Minutos después de las 9.30, el imputado llegó a la casa –en la que estaba su expareja– abrió la puerta sin la autorización de la mujer y comenzó a amenazarla y a agredirla física y verbalmente. Dos vecinos vieron cuando la víctima era golpeada por el hombre, a quien le dijeron que interrumpiera la agresión; ante la negativa del imputado, llamaron a la policía.
Según explicó el fiscal, “la reacción de los vecinos permitió el cese de la acción tendiente a matar a la mujer”. En tal sentido, agregó que “no logró concretar su cometido por circunstancias ajenas a su voluntad”.
La víctima debió ser trasladada y quedó internada en el Samco de Villa Ocampo a raíz de las graves heridas que tenía en distintas partes de su cuerpo. Además, debió ser llevada al hospital Central de Reconquista para la realización de una tomografía computada.
Ríos también detalló que la víctima “estuvo 80 días sin poder reintegrarse a su vida social y laboral. También debió iniciar un tratamiento psicológico que continúa en la actualidad a raíz de la violencia inusitada con la que fue agredida y el temor que le produjo el ataque”.