Ingresó al Congreso el «mega DNU» que firmó el presidente Macri
Apenas fue publicado en el Boletín Oficial el pasado 11 de enero, la oposición adelantó su rechazo a la iniciativa, al entender que al modificar más de 100 leyes el Poder Ejecutivo se arroga facultades que son inherentes al Legislativo, alterándose la división de poderes.
El «mega DNU» de «desburocratización y simplificación del Estado» que firmó el presidente Mauricio Macri ya ingresó al Congreso y será analizado ahora por la comisión bicameral de Trámite Legislativo, una vez que se constituya.
El DNU, que cuenta con más de 150 fojas, será examinado por la bicameral, en la que Cambiemos obtendría dictamen de mayoría y se perfila con buenas chances de convalidarlo ya que cuenta con 8 de los 16 integrantes del cuerpo, con la posibilidad de que desempate el presidente de la comisión.
La presidencia del cuerpo corresponde al Senado, y todo indica que el radical Luis Naidenoff (Cambiemos) continuará al frente de la misma, la reunión constitutiva podría realizarse «la semana que viene», o a lo sumo la siguiente.
Mauricio Macri
El apuro es porque una vez que ingrese al Parlamento un Decreto de Necesidad de Urgencia y se remite a la bicameral, ese órgano tiene un plazo máximo de diez días hábiles para emitir dictamen y girarlo a cada Cámara para que sea debatido.
La oposición sólo podrá derogar el DNU si logra juntar mayoría simple de los votos tanto en el Senado como en Diputados: con que en sólo una de de las cámaras prevalezca la posición del oficialismo, el DNU quedará firme.
La discusión llegará al recinto una vez que el presidente Mauricio Macri inaugure las sesiones ordinarias el 1 de marzo, ya que el Gobierno no tiene intenciones de convocar a extraordinarias.
Sin embargo, la hoja de ruta del «mega DNU» no esperará a marzo y comenzará a escribirse en los próximos días.
Un grupo de diputados del Frente Renovador apeló a la vía judicial para intentar frenar el DNU, al presentar una acción declarativa de inconstitucionalidad.
Según el diputado radical Luis Petri -quien es propuesto como integrante de la bicameral- defendió la iniciativa al sostener que los DNU «son facultades que tiene el Poder Ejecutivo» y que además tiene «el concurso del Poder Legislativo que lo convalida».
Por el Frente Renovador, los legisladores optaron por la vía judicial al presentar una acción declarativa de inconstitucionalidad del decreto. En el escrito, al que tuvo acceso Conclusión, fundamentaron la “inexistencia” de la “necesidad y urgencia”, y advirtieron por el abordaje de “materias prohibidas o vedadas” en el artículo 99 de la Constitución Nacional.
Por su parte, el diputado nacional Daniel Arroyo sostuvo: “Esto es un retroceso para la democracia. Se permite embargar la cuenta a sueldo, que se utilicen fondos del ANSES de manera que beneficia al sector privado. Esto hay que debatirlo en el ámbito del congreso”.
Otra de las materias que abordó el presidente Macri en el DNU, es la materia penal , los legisladores massistas señalaron que «modifica normas que atañen la Unidad de Información Financiera (UFI) y a la llamada ‘Ley Antilavado’”.
Otro de los aspectos que interviene es el tributario en la parte que se propone “la modificación del artículo 147 de la Ley de Contratos de Trabajo, en el caso de que el embargo previsto en la norma proviniese de autoridad o Ente Público, ocasión en que redundaría en perjuicio ‘fiscal’ del trabajador”.
Por su lado, el interbloque Argentina Federal, casi el principal espacio opositor con el que Cambiemos profundizó negociaciones, tuvo sus reservas por el DNU.
El diputado Pablo Kosiner cuestionó la diversidad de temas que contiene el decreto y deslizó que “hay cuestiones que ponen en riesgo su constitucionalidad”. Mientras que el senador Miguel Pichetto, hombre fuerte de la Cámara alta y determinante para saber qué suerte correrá la norma, lo calificó de “abusivo” y dijo que “fue un poco mucho”.