Claves para identificar y tratar una picadura de alacrán
Es un incidente muy frecuente que puede tener consecuencias graves sobre la salud, sobre todo en los más pequeños.
- Corazón Animal
- Mar 28, 2018
Las picaduras de alacrán pueden ser realmente peligrosas para la salud. Si bien existen algunas especies que no son venenosas y, en consecuencia, las picaduras son menos graves, hay algunas que pueden tener severos efectos adversos para la salud. En algunos casos, el paciente incluso puede legar a tener riesgo de vida.
Recientemente se conoció la noticia de que un artrópodo de estas características picó a un niño pequeño -de dos años- en la ciudad de Rosario. El pequeño se encuentra internado en el Hospital Provincial de la localidad y su estado es grave, ya que las picaduras de estas características suelen impactar más fuertemente en los más chicos.
En primer lugar, es importante considerar cuáles son las principales manifestaciones que aparecen en el paciente ante una lesión así. De este modo, se lo podrá llevar más rápidamente a un centro de salud para que reciba la atención y el cuidado adecuados.
¿Cuáles son los síntomas de una picadura de alacrán?
- Dolor local y parestesias -sensación anormal de cosquilleo, calor o frío que se siente en la piel-, lo cual se debe a un incremento de la sensibilidad en los receptores específicos
- Sensación de cuerpo extraño en la faringe
- Contracciones involuntarias, que se deben a alteraciones de la conducción nerviosa periférica
- Fiebre: si bien no se da en todos los casos, aproximadamente en 80% de las personas que sufren una picadura de alacrán manifiestan este síntoma
- Hipertensión arterial sistémica: ocurre principalmente por la liberación de catecolaminas -neurotransmisores que se encuentran en la sangre-
Por otro lado, es importante tener en cuenta cuáles son las acciones que se pueden realizar una vez que se detecta la picadura del alacrán. En primer lugar, se recomienda aplicar hielo y consultar a un médico de forma urgente. Si es posible, se debe identificar la especie de alacrán, ya que no todos son iguales y, en consecuencia, las lesiones pueden evolucionar de manera diferente.
La picadura puede ser solo local, lo que produce un gran dolor, pero no llega a producir daño en los tejidos donde se produjo la picadura. En este tipo de picaduras, la persona no corre riesgo de vida y la molestia y dolor provocados por la lesión se irán en poco tiempo.
Sin embargo, es importante saber que hay otras picaduras que pueden desencadenar un envenenamiento generalizado en el paciente -sobre todo en niños pequeños-. A pesar de que también se produce un dolor intenso localmente, el paciente suele manifestar otros síntomas porque el veneno comienza a distribuirse por todo el cuerpo. Así, la persona puede llegar a sentir taquicardia, dificultad respiratoria, salivación, lagrimeo y temblores, entre otras afecciones. En los casos más graves se pueden manifestar vómitos y diarrea.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación y desde las diversas instituciones de salud -sobre todo de las zonas donde hay alacranes- se han difundido una serie de recomendaciones que pueden ser útiles al momento de la prevención de la picadura. De esta manera, se podrá evitar que la persona corra riesgo de vida o de que sufra una lesión que le provoque dolor y molestia durante algunos días.
– Revisar y sacudir prendas de vestir y calzados antes de colocarlos sobre el cuerpo o en los pies
– Sacudir la ropa de cama antes de acostarse o acostar un bebé o niño
– Evitar caminar descalzo
– Utilizar rejillas en desagües, cañerías y otras aberturas
– Colocar burletes o alambre tejido (mosquiteros) en puertas y ventanas
– Revocar las paredes, reparar grietas en pisos, paredes y techos
– Mantener limpia y ordenada la vivienda y alrededores. Evitar la acumulación de materiales de construcción, escombros, leña porque suelen ser lugares donde se alojan.
Fuente: IProfesional