Dueños de salón de fiestas, bajo arresto domiciliario
El juez Adrián Pafundi, titular del Juzgado de Faltas Nº 2, castigó a dos personas por la violación reiterada de las clausuras de su negocio por parte de la secretaría de Control y Convivencia Ciudadana.
- Judiciales
- May 11, 2015
Dos personas dueñas de un salón de fiestas en el centro de la ciudad deberán permanecer 10 y 5 días bajo arresto por violar reiteradamente las distintas clausuras que le había realizado la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana.
“La actividad comercial requiere responsabilidades y cumplimientos y quienes no estén dispuestos a ello, son sancionados. Es nuestro deber como Estado velar por la seguridad de todos”, señaló el Secretario Pablo Seghezzo.
El secretario Pablo Seghezzo confirmó que este viernes se conoció el fallo del Juzgado de Faltas Nº 2, a cargo de Adrián Pafundi, quien determinó 10 días de prisión efectiva en carácter de domiciliaria para una de las dueñas y 5 días de prisión en suspenso para su socio del salón de fiestas Jubilee, ubicado en Pasco 1537.
De acuerdo a lo que explicó el funcionario, el lugar fue clausurado por primera vez en diciembre de 2013, sin embargo nunca dejó de funcionar, ya que incumpliendo las sanciones puestas por el municipio, decidió seguir trabajado. Debido a ello se realizaron más de una decena de inspecciones durante todo el año pasado, en el que se constató la violación de clausura, falta grave que la misma Secretaría denunció en la Justicia.
“Realizamos varias inspecciones en el lugar, e incluso una vez decomisamos equipos de música y mesas para que no siguieran funcionando”, indicó Seghezzo. “La primera vez fuimos por denuncias de vecinos y descubrimos que no tenía habilitación, por lo que se procedió a colocar la faja de clausura”; señaló. Pero, continuaron las irregularidades: “Debimos ir más de una decena de veces porque ese lugar seguía funcionando, violando la sanción que había tomado la Secretaría de Control, por lo que en cada procedimiento se realizó la denuncia penal que terminó en este fallo”, precisó.
Tras el fallo judicial, Seghezzo evaluó: “Es importante que la Justicia dé este tipo de gestos y demuestre que quien se maneja fuera de la norma será sancionado con dureza. Una persona que tiene la impunidad de violar una clausura no puede salir sin consecuencias de este tipo de conflictos”.
“Quien tiene un comercio, cualquiera sea el rubro, debe manejarse dentro de la norma y respetar lo que la misma le impone. Estas personas claramente no lo hicieron y ahora deberán pagar las consecuencias”, valoró y finalizó: “Nuestro deber como Estado velar por la seguridad de todos”.
De esta manera la titular del lugar deberá permanecer 10 días en el domicilio, sin poder salir por ningún motivo, siempre monitoreada por un encargado de la fiscalía. Este fallo es inédito en la ciudad de Rosario, ya que en primer lugar no es común que un “empresario” tome este tipo de actitudes.