Gestión cultural de la mano de José Luis Castiñeira de Dios
El músico y compositor José Luis Castiñeira de Dios se presentó en Rosario para hablar sobre la gestión cultural. En diálogo con Conclusión, el artista expresó que “el arte es la expresión más refinada de los valores de una sociedad".
Política, educación, comunicación e ideología; la idea de Cultura y Nación y el rol de los organismos internacionales de la cultura. Éstos fueron los puntos abarcados por el músico y compositor argentino José Luis Castiñeira de Dios en Rosario.
El artistas se presentó en el Centro Cultural Atlas para brindar una conferencia sobre “La gestión cultural: Experiencia argentina y comparada”. En su disertación, Castañeira de Dios habló sobre la historia y teoría de la política cultural, los modelos de éstas, la experiencia de Europa en la materia y también realizó un repaso de las políticas culturales en Francia y España. Además hizo un recorrido histórico por las políticas culturales.
En diálogo con Conclusión, Castañeira de Dios manifestó que “las políticas culturales son herramientas del Estado para llevar adelante ciertos valores que sostienen la sociedad, algunos de los cuales son fundamentales”. Entre esos valores resaltó la identidad, la soberanía, la idea de nación y la idea de comunidad.
Consultado sobre el escenario actual en política y gestión cultural, el músico y compositor expresó que el panorama los encuentra “desunidos y golpeados” pero sostuvo que “es necesario pensar en lo que va a suceder cuando termine este período tan negro para la cultura y la política argentina”.
Con respecto a la actualidad del país, el artista opinó que “parece que fuera bueno tratar de ser el mejor alumno de los países centrales y a eso hay que terminarlo”. Y resaltó la importancia de saber quiénes somos, hacia a dónde vamos y cuál es el destino que queremos para nuestra sociedad.
Por último, al ser consultado sobre la construcción de una identidad cultural, el músico opinó: «Para mí hay que tratar de recuperar espacios dentro del ámbito de la sociedad, no solamente esperar a que el Estado lo resuelva. El Estado tiene que resolver algunas partes pero también la sociedad se tiene que hacer cargo de una cantidad de tareas que van a servir para que esto tenga una base sólida y no sea circunstancial y temporario».