Ganó por un Rayo
El equipo de Bidoglio tuvo una buena producción en la victoria por la mínima sobre Patronato en el Coloso, donde generó una gran cantidad de situaciones que no pudo concretar hasta que apareció el goleador Héctor Fertoli.
- Deportes
- Nov 30, 2018
En la lluviosa jornada de viernes, Newell’s celebró una victoria gracias a la aparición de un Rayo en el estadio Coloso Marcelo Bielsa. Es que tras una buena producción donde la pelota no traspasaba la línea de cal, el goleador Héctor Fertoli puso la cabeza para vencer por la mínima a Patronato.
En la presentación de Héctor Bidoglio como técnico interino, el elenco leproso obtuvo un vital triunfo para sumar en la tabla de abajo, y tuvo un buen rendimiento generando una gran cantidad de situaciones en arco contrario, pero volvió a demostrar sus fallas en la última jugada.
El partido se jugó entre la intensidad propia y las falencias defensivas del rival, contexto que posibilitó una decena de situaciones nítidas que no terminaron en las redes por impericia de sus atacantes, hasta que apareció el goleador Héctor Fertoli en el complemento.
En una cancha rápida por la lluvia, la Lepra salió a jugar el encuentro con mucha movilidad en el mediocampo, donde el Gato Formica tomaba las riendas y distribuía juego hacia los costados, aprovechando la velocidad de sus compañeros para el desborde.
El flojo retroceso de Patronato, cuyos volantes carecían de contención y sus defensores se complicaban solos, facilitaba las cosas para Newell’s, que en la primera parte contó una notable producción y una gran cantidad de situaciones dilapidadas en el arco paranaense.
Asimismo, el equipo de Bidoglio sufrió en algunas contestaciones en área propia por parte de Patronato, un equipo que se planteaba como mucho más criterioso de mitad de cancha hacia delante que hacia atrás. En esas pocas, se encontraba con un bien parado Aguerre.
Los ingresos de Ferroni, Rodríguez y Paredes le pusieron el moño a una buena victoria de Newell’s, que sin embargo terminó pidiendo la hora en el Coloso, porque se quedó sin piernas y tuvo que soportar el aluvión paranaense con los últimos recursos a disposición.