Nuevas pruebas en el caso Chiara Páez
Pericias ordenadas por el fiscal Clavero arrojaron rastros de sangre en la habitación del novio y en otros ambientes de la casa. También se realizó una nueva inspección ocular en la vivienda.
Nuevas pistas se despliegan en el caso de Chiara Páez, la adolescente de 14 años, embarazada, asesinada meses atrás en la ciudad de Rufino.
Tal como adelantó el fiscal del Ministerio Público de la Acusación, Mauricio Clavero, que, si bien aclaró que aún restan los informes finales de los especialistas, todo indicaría que «son de sangre las salpicaduras encontradas en los muebles y en el piso de la habitación del menor de 16 años que era el novio de la víctima, y en el piso de distintos ambientes de la casa».
El pasado miércoles 8 de julio, a las 20 horas, a pedido del mismo Clavero, se realizó la prueba de luminol. En esa oportunidad, también se hizo una nueva inspección ocular en la casa para contrastar lo que relató el novio de la víctima en sede judicial, quien aseguró que el asesinato lo cometió solo, en el patio y en el taller de la casa y con la luz apagada.
«Todos los resultados que obtengamos de las nuevas pruebas llevadas a cabo serán remitidos a los peritos para que determinen si la víctima pudo haber sido llevada de un lugar a otro, y cómo pudo haberse hecho dicho traslado», señaló Clavero. No obstante, el fiscal adelantó que «las nuevas pruebas nos permitirían corroborar la hipótesis que venimos sosteniendo desde la Fiscalía: la participación de las dos personas que están imputadas y privadas de su libertad».
El funcionario del MPA también indicó que «habría dos escenas del crimen: una es el taller y el patio de la casa; y la otra sería la habitación del novio de la víctima».
Como se recordará, en las pericias realizadas luego del hallazgo del cuerpo de Chiara, se hallaron pelos en la mano de la niña. Los mismos fueron remitidos para la realización del correspondiente estudio de ADN.
En ese sentido, Clavero explicó que fueron enviados a Buenos Aires. «El estudio de ADN puede ser realizado de dos maneras con la misma calidad de resultado: uno se hace desde el núcleo de las células; y otro desde las mitocondrias. En este caso –agregó el fiscal del MPA–, como los pelos no tienen el bulbo, se debe hacer el análisis mitocondrial».
En relación a ello, el fiscal aclaró que «con los pelos enviados a Buenos Aires, se remitieron los análisis de ADN que se les realizaron a la víctima, a quien era su novio y a los dos detenidos. De esta manera, se podrán cotejar los resultados de los pelos con los parámetros de estas cuatro personas».
Foto: Florencia Vizzi