Estado de excepción y represión en Ecuador: las causas que llevaron a la explosión social
Las manifestaciones populares aparecieron después de que el gobierno nacional tomara un empréstito millonario.
El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, decretó ayer el Estado de Excepción «para precautelar el orden en todo el territorio del país, y la seguridad ciudadana» a raíz de las manifestaciones en contra de la liberación del precio de los combustibles y la quita de subsidios, medidas que provocaron una suba del 123% en el precio del combustible. La primera jornada terminó con más de 30 ciudadanos heridos y casi 300 personas detenidas.
Los aumentos del combustible fueron resultado de una serie de medidas tomadas por el gobierno nacional ecuatoriano, que implican diversas reformas económicas, a partir de la línea gradual de crédito tomada por Ecuador por el valor de 10.200 millones de dólares de varias instituciones financieras internacionales, entre ellos, 4.200 millones del FMI.
Las decisiones adoptadas ¡están en firme! He dispuesto el Estado de Excepción para precautelar el orden, la seguridad ciudadana y con el fin de controlar a quienes pretenden provocar caos. No accederemos a chantajes y actuaremos acorde a la ley. #NoAlParo #DecididosACrecer pic.twitter.com/sLVyIljQ7Y
El Fondo Monetario Internacional fijó a Ecuador un calendario de reformas a cambio del dinero prestado, que incluía la reducción del gasto público, un incremento de ingresos y una reforma laboral que aliente la productividad. Los ecuatorianos llevaban esperando lo que comúnmente denominan “paquetazo” desde hace meses. Una de las condiciones solicitadas por el organismo multilateral es la eliminación del subsidio estatal a las gasolinas extra y ecopaís, así como al diésel; además, se contempló la liberalización de sus precios.
Las decisiones adoptadas ¡están en firme! He dispuesto el Estado de Excepción para precautelar el orden, la seguridad ciudadana y con el fin de controlar a quienes pretenden provocar caos. No accederemos a chantajes y actuaremos acorde a la ley. #NoAlParo #DecididosACrecer pic.twitter.com/sLVyIljQ7Y
— Lenín Moreno (@Lenin) October 3, 2019
A partir de esto, numerosas organizaciones sindicales de transportistas, taxistas y otros afectados bloquearan las calles y carreteras por todo el país. En simultáneo, ocurrieron diferentes enfrentamientos con la policía, la cual reprimió violentamente a los manifestantes, que se encontraban cerca de la sede de Gobierno, en el centro histórico de Quito, lanzando gases lacrimógenos contra los grupos que se mantenían en las calles a pesar de la medida de excepción decretada horas antes por el presidente, y que a su vez se defendían con piedras y bombas molotov.
Atención| La #DefensoríaDelPueblo condena el uso excesivo de la fuerza evidenciado en redes sociales. Además expresamos nuestra preocupación por la ubicación de las personas detenidas, ya que no se encuentran en las unidades de flagrancia como dispone la ley.#NoALaViolencia pic.twitter.com/TIFbjS6GgG
— DefensoríadelPueblo (@DEFENSORIAEC) October 3, 2019
La @CIDH expresa preocupación por uso excesivo de la fuerza por la policía en #Ecuador, como evidencian imágenes de represión a las protestas sociales. Seguimos con preocupación situación de centenar de detenidos en todo el pais, por lo menos 19 heridos y 20 periodistas agredidos
En este escenario, Lenín Moreno dispuso el Estado de Excepción con la intención de contener las protestas sociales que pusieron en jaque el poder del gobierno nacional y de garantizar la “movilidad en todo el territorio nacional”. Esto le permite volcar a las calles las Fuerzas Armadas para establecer el orden. “Las medidas siguen firmes. No existe la más mínima posibilidad de cambiar aquellas medidas relacionadas con ese subsidio perverso que causaba daño al país”, dijo Moreno, descartando rumores que hacían pensar en una posible marcha atrás. El decreto presidencial agravó aún más el ánimo de los manifestantes, que reforzaron las acciones. “Ratificamos continuar con la medida indefinidamente”, declaró Carlos Brunis, líder de los taxistas de Quito.
El ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, explicó que bajo el estado de excepción militares y policías actuarán en conjunto para «restablecer el orden». Con la medida, el gobierno también está facultado para suspender o limitar derechos como el de la libre movilidad o imponer la censura previa para la prensa. Además se autoriza el posible cierre de puertos, aeropuertos y pasos fronterizos.
Las protestas tuvieron la adhesión de organizaciones y movimientos indígenas, y fueron acompañadas por declaraciones de legisladores leales al expresidente Rafael Correa, pidieron este jueves un adelanto de elecciones y una sesión extraordinaria en la Asamblea Nacional para exigir la destitución del mandatario Lenín Moreno.
Atención| La #DefensoríaDelPueblo condena el uso excesivo de la fuerza evidenciado en redes sociales. Además expresamos nuestra preocupación por la ubicación de las personas detenidas, ya que no se encuentran en las unidades de flagrancia como dispone la ley.#NoALaViolencia pic.twitter.com/TIFbjS6GgG
— DefensoríadelPueblo (@DEFENSORIAEC) October 3, 2019