Imputaron al policía que le disparó por la espalda a un joven de 17 años
Se trata de el policía Francisco Aldo Olivares y fue acusado por los delitos de "homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por haber abusado de su función como miembro integrante de una fuerza de seguridad".
- Judiciales
- Nov 5, 2019
Un subcomisario de la Policía de Santa Fe quedó imputado con prisión preventiva como acusado de haber asesinado de un tiro por la espalda a un joven de 17 años que se encontraba desarmado, luego de que intentara asaltar a una mujer mayor en la capital provincial.
El policía Francisco Aldo Olivares fue imputado de los delitos de «homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por haber abusado de su función como miembro integrante de una fuerza de seguridad».
Olivares es acusado del crimen del adolescente Lautaro Joaquín Saucedo, hijo de otro policía, ocurrido el 30 de octubre pasado a las 10:30 en el barrio Guadalupe.
En esa ocasión, el joven interceptó a una mujer mayor que había salido de compras y le exigió la bolsa que llevaba.
Según puede apreciarse en las imágenes de seguridad que fueron difundida en redes sociales, la mujer le demostró que no llevaba nada y el joven optó por marcharse a la carrera.
Sin embargo, la damnificada optó por llamarlo y ofrecerle dinero de su monedero, que el adolescente tomó para luego seguir su fuga.
En ese momento, el subcomisario Olivares, que se encontraba vestido con ropas de civil mientras cumplía con una custodia en forma irregular, tras observar el hecho desde varios metros de distancia intervino y realizó disparos a la distancia contra el joven mientras escapaba.
Cuando el menor se encontraba a unos 50 metros del tirador, fue alcanzado por uno de los proyectiles en la zona lumbar, por lo que murió alrededor de cinco horas más tarde.
La imputación contra el policía, que puede implicar una pena de prisión perpetua, fue pedida por los fiscales Ezequiel Hernández y Martín Torres, y efectivizada este fin de semana por la jueza Rosana Carrara.
Según los fiscales, el subcomisario de 51 años «actuó sobre seguro, en forma arbitraria y violando los deberes propios de su función de miembro integrante de una fuerza de seguridad».
«Su accionar fue con alevosía y abusando de sus funciones», concluyeron los instructores, al evaluar que el joven asesinado se encontraba desarmado y de espaldas.