El fiscal regional Serjal fue apartado de una causa por presunta corrupción
A Serjal se lo acusa de haber cerrado la causa contra un empresario y, días después, haber adquirido dos autos cero kilómetros en la concesionaria propiedad del denunciado.
- Judiciales
- Nov 21, 2019
El fiscal regional del Ministerio Público de la Acusación de Rosario, Patricio Serjal, pidió ser apartado de sus funciones en la reapertura de una causa que investigaba, al ser sospechoso de favorecer a un empresario al cerrar el caso, según informó Fiscalía.
No obstante, el fiscal general de la provincia, Jorge Baclini, entendió que el argumento de Serjal tiene «endeblez» y pidió que se lo aparte del cargo por declarar la inexistencia del delito en una causa que, a su entender, presenta un delito intencional visible, según señaló el portal Aire de Santa Fe.
A Serjal se lo acusa de haber beneficiado a un empresario que había sido denunciado por el vaciamiento de una compañía, ya que días después de declarar la inexistencia del delito en la causa, el fiscal regional compró dos autos cero kilómetros en la concesionaria propiedad del denunciado.
El valor de la compra de los dos vehículos -un Toyota Etios y un Toyota Corolla- equivale a tres millones de pesos y ambos están a nombre de Serjal y su esposa. En este sentido, además de solicitar la separación de la causa, el funcionario judicial pidió dar una explicación sobre la forma en la que adquirió los dos automóviles.
Tras su apartamiento del cargo, se iniciará una investigación sobre el ex funcionario judicial -que estará a cargo del fiscal regional de Santa Fe, Carlos Arietti- y, si se encuentran evidencias del mal accionar de Serjal, la Legislatura de la provincia podrá apartarlo definitivamente del cargo y destituirlo.
La causa del empresario
La causa que disparó el apartamiento del cargo de Serjal involucraba a Omar Augusto Santero, propietario de la firma Carrocería Sudamericana, y a Rómulo González, a quien se acusaba de haber vaciado la compañía antes mencionada para favorecer a AutoRosario, una concesionaria que Toyota tiene en la ciudad.
La causa, que pasó por cinco años de idas y vueltas judiciales, según explicó la querella, estuvo expuesta a demoras y cambios de fiscales, hasta que fue cerrada por Serjal. Pero ante los últimos hechos, el fiscal Baclini ordenó la reapertura del caso.
El fiscal regional, a veintinueve días de cerrar la causa y liberar de cargos a González, renunció a un plan de pagos de un vehículo que había contratado con anterioridad y compró dos autos cero kilómetros en AutoRosario.