A contramano de Europa y EEUU, en Rusia el gobierno controla los bancos

Una escena que se vio en los últimos días en Rusia evidencia una de las características principales del sistema de poder de ese país y como funciona su economía.

En la misma puede observarse al titular del banco más poderoso del gigante euroasiático (Herman Gref, de Sberbank) durante una reunión con el presidente ruso Vladimir Putin, en la cual le informa el estado financiero de la entidad, que es propiedad del Estado.

El lenguaje corporal es elocuente a ese respecto, en el que queda claro quién rinde cuentas a quién.

En Rusia, el gobierno controla el sistema financiero y tiene una influencia dominante (pero no total) en los medios.

Es un caso que se encuentra en la otra orilla respecto a lo que ocurre en Estados Unidos y Europa, donde esta fórmula se invierte y los intereses financieros ejercen el control sobre la mayoría de los medios (excepto algunos de alternativos), y tener un control casi total sobre el gobierno.

Entre los menesteres del encuentro se despuntó sobre la incorporación la inteligencia artificial (IA) -cada vez más presente en áreas como el tránsito, tareas domésticas, y cada vez más ámbitos (incluso cognitivo-sensoriales)- al sistema bancario como una forma de facilitar transacciones y simplificar las actividades de ciudadanos rusos.

Para integrar la inteligencia artificial, Sberbank involucró la inteligencia natural. Creó una academia de inteligencia artificial para estudiantes de secundaria que ofrece conferencias de los desarrolladores de software del banco en todo el país.

Todos los ganadores de los Juegos Olímpicos Académicos anuales de este año son estudiantes de varias regiones. Los científicos de datos talentosos obtienen beneficios cuando solicitan las mejores universidades rusas.