La Argentina que viene: disputas por la producción y el trabajo ante la crisis global

 

“Se va a venir un debate importante sobre qué sendero seguir en la pospandemia”, comenzó diciendo el subsecretario de Política y Gestión Comercial de la Nación, Alejandro Barrios.

En una disertación en el marco del Ciclo de Formación Santa Fe: «Los Desafíos del Trabajo en el Modelo Productivo Actual» organizado por la Asociación Empleados de Comercio (en conjunto con el ministerio de Trabajo provincial), el funcionario se refirió al escenario actual argentino en relación al mundo del trabajo, los desafíos que tendrá que afrontar el Gobierno, en medio de la disputa a nivel global, que definió como capitalismo productivo versus capitalismo financiero.

Para adentrarse en el tema de la charla, el licenciado en Economía explicó que “hasta 1970 la contradicción principal que tenían los trabajadores era capital-trabajo. El enemigo era el empresario, entonces la lucha era por mayores niveles salariales, mejorar las condiciones de trabajo. En la academia le llamamos el fordismo, esto encontró un límite. En Europa se puede reflejar en el mayo francés, en Argentina en el Cordobazo. La clase trabajadora iba por más y el sistema reacciona con una reformulación”.

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“Hay una nueva forma de acumulación económica, donde uno ve que las empresas no solo obtienen ganancias produciendo mercancía, sino que también en el sistema financiero. Esto representa una derrota para el pueblo trabajador. Nunca más tuvimos una avanzada política como en el 70. Y esto es porque el mundo se está subordinando al sistema financiero, a la reproducción del capital financiero. Los trabajadores tenemos una novedad. Pasamos del capital-trabajo a capital financiero- capital productivo”, continuó Barrios.

 

“El capitalismo tiene períodos muy cortos de crecimiento, 3 o 4 años, y crisis. La última gran crisis fue la del 2008. Del 45 al 75 el capitalismo no paró de crecer, pero a fines de 2019 la producción era similar a diez años antes, o sea el capitalismo está estancado”, señaló el funcionario de la cartera que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación.

“Desde mediados de los 70 para acá no hay más pleno empleo y la ganancia se reproduce en el sistema financiero. O sea, los grandes capital pueden hacer mucho dinero sin necesidad de explotar a los trabajadores. Es como si hubiera una población excedente, que no es necesaria para obtener la ganancia”.

“Si no se da un escenario de destrucción de capital financiero va a ser difícil que las democracias se puedan sostener y no nos enfrentemos al desprestigio de la política como pasó en 2001”.

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“El último informe de la Cepal dice que el comercio internacional en la región va a caer cerca del 30%. Niveles similares a 1930. En Argentina la caída del PBI va a estar cerca del 10%. La herencia macrista no solo era terrible en términos de deuda y comerciales”.

“En 2021 se van a sumar 200 mil chicos y chicas a la población laboral activa. Ya en el primer trimestre 10,4% de la población laboral activa (unos 22 millones en total) estaba desocupada. Cerca del 18% de la PEA (Población Económicamente Activa) tenía trabajo y buscaba un nuevo trabajo porque la plata no le alcanzaba”.

¿Qué se hace frente a este escenario?

Sobre las medidas que el Gobierno nacional encaró cuando comenzó la gestión de Alberto Fernández, Barrios enumeró: “Primero, gobernar el tipo de cambio, bajar fuertemente la tasa de interés porque ningún proceso productivo puede ser activo con una tasa del 80%. Otra prueba de que estaba todo subordinado al mundo financiero”.

“Desde el Gobierno hasta que no arreglamos la deuda, no pudimos anunciar los programas económicos. Tuvimos que posponerlos, o sea el mundo financiero subordina a las democracias. Y el Papa lo plantea muy claro, es el único actor mundial que lo tiene claro”, continuó Barrios.

“Una vez que se acordó cómo van a ser los futuros desembolsen de la deuda, el Gobierno va a lanzar unas 60 medidas para relanzar la producción”, adelantó el funcionario de la cartera de Comercio.

 

Administración del comercio

El subsecretario de Política y Gestión Comercial de la Nación ahondó en la importancia de proteger los puestos de trabajo en el país por sobre la producción extranjera, algo que recobra un valor superlativo ante el escenario global actual, en el cual la batalla es por esa variable, como se evidencia en las disputas soberanistas -hoy evidenciadas incluso en potencias anglosajonas, como Estados Unidos o el Reino Unido (asunción de Trump y Brexit como hitos de procesos más complejos), otrora impulsoras del esquema «globalizado» y «multilateral»-. Hoy esa función globalista está más difusa, y se consolida China como garante de ese sistema y tal como prometió a los líderes europeos en Davos.

 

“Estamos administrando fuertemente el comercio. Dado este contexto mundial va a haber containers de todos los países para vender a cualquier lugar que los reciba. Entonces estamos siendo muy firmes en la importación, esto nos está costando mucho en términos políticos y judiciales. En el acuerdo con la Unión Europea (UE) también, Argentina tiene más para perder que para ganar. Por eso, nosotros lo vamos a respetar porque lo firmó el Estado argentino, pero vamos a morigerar los efectos negativos”, explicó Barrios.

El funcionario contó que esta postura tampoco fue bien recibida por los países del Mercosur, “cuyos socios están siendo muy duros por esto”. “En el Mercosur somos 3 a 1, tres que quieren abrir la economía y les decimos que el mundo se está cerrando, está entrando en una etapa de mayor protección de los pocos empleos que tienen, entonces no podemos abrirlo porque nos van a invadir las importaciones que les sobra al primer mundo”, advirtió.

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En contraposición, introdujo el plan del gobierno: “Lograr recuperar de a poco los ingresos de los argentinos, e intentar que ese consumo sea de producción nacional en mayor medida que importada”.

“Desde 2003 hasta 2011 le comprábamos a Brasil 20 mil millones de dólares. Vinieron los liberales y Argentina le compró a Brasil por 12 mil millones de dólares. O sea cayó casi un 50% el comercio”, precisó Barrios, al tiempo que agregó: “Los liberales destruyen ese intercambio comercial. Dicen ‘queremos libertad para la contratación’, pero destruyen el mercado laboral”.

“Es verdad que la industria no va a ocupar los mismos puestos de trabajo que hace 60 años por los adelantos tecnológicos. Pero con la administración del comercio vamos a generar empleo y nuestros trabajadores van a tener más plata para comprar más cosas”, dijo confiado Barrios.

Trabajo vs. asistencialismo

Una de las propuestas para ayudar a los argentinos durante la crisis es la renta universal. Sobre esto, Barrios indicó: “En Europa están discutiendo la renta básica universal porque parece ser que no van a tener pleno empleo en los próximos años. Nosotros nos enfrentamos con ese argumento en 2001 y 2003 por parte de Carrió. En la CTA había una propuesta en ese sentido. Nos parece que esa agenda es Europea, no latinoamericana, menos argentina”.

En este sentido, citó al papa Francisco, quien “dice ‘salario universal’, que implica trabajo, construir valor: capital y trabajo. Sería volver a aquel capitalismo productor de mercancía produciendo mercancías que hoy no son reconocidas como tal”.

“La solución para los problemas de Argentina no es la transferencia a los hogares. Por supuesto que en el medio de la emergencia, sí, pero estamos discutiendo hacia dónde queremos ir. No queremos ir a un lugar donde la mayoría sea asistida a través de ingresos del Estado”, aseguró Barrios.

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En cuanto al desafío de generar cientos de miles de puestos de trabajo, Barrios adelantó que una de las estrategias puede ser reducir la jornada laboral, lo que están implementando algunos países europeos como Francia y Alemania.

Sin embargo, apuntó: “Nosotros tenemos otra propuesta. Creemos que hay muchos trabajos que hace el pueblo para la reproducción de su comunidad, tareas que ya se hacen, que tenemos que transformarlos en empleos actuales. Por ejemplo las amas de casa, los voluntarios en clubes de barrio que le dan de comer a la gente, los que cuidan ancianos o niños. Tenemos que tener el coraje de transformarlos en empleo”.

“Tenemos que ser eficaces en hacer feliz al pueblo argentino. Eso se logra teniendo trabajo. Que los hijos avizoren un futuro mejor que el de su padre”, consideró el funcionario. “Del 2003 al 2015 aumentaron los salarios y los derechos de los trabajadores y nunca hubo tanta generación de empleo como en esos años”, destacó el licenciado en Economía.

Además, señaló sobre la importancia de crear fuentes de trabajo genuinas: “Si un trabajador ingresa al mundo laboral, lo hace con obra social, aportes jubilatorios, aguinaldo, vacaciones, entre otros. No podemos renunciar a eso que si bajamos los costos laborales va a haber mayor producción de empleo, eso no va a pasar”.

Impulso al crédito y el consumo

El consumo para el Gobierno es un factor clave para salir de a poco de la crisis económica, pero es una de las dos caras de la moneda, la otra es la producción.

Como uno de los planes para la reactivación económica, Barrios anunció que el Gobierno impulsará programas de “fuerte impulso crediticio a la producción y fuerte estímulo al consumo”.

En función de esto, mencionó que el Gobierno buscará estimular a los bancos para que otorguen créditos a las Pymes para alentar a la producción.

“Nosotros no creemos que los problemas de los hogares argentinos se resuelvan solo con ingresos. El argentino y la argentina se siente más digno si con sus salario puede alimentar a su familia. Tenemos que darle dignidad a partir del trabajo”, aclaró Barrios.

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Federalizar

En el esquema de desarrollo productivo, el funcionario de la Subsecretaría de Política y Gestión Comercial enfatizó la necesidad federalizar recursos nacionales, para así fomentar las economías regionales y los puestos laborales en cada sector del país.

Por eso, Barrios adelantó que desde el Gobierno impulsarán el Plan Arraigo. “Los chicos que nacen en Jujuy tienen el mismo derecho que los que nacen en Recoleta. Entonces tenemos que hacer más hospitales, escuelas, universidades”, al tiempo que destacó la necesidad de hacer viviendas, cloacas y trenes.

“¿Qué hace una familia cuando una persona tiene una dificultad? Se reorganiza para ayudarlo. Como comunidad tenemos que hacer lo mismo”, ejemplificó el economista. “Entonces el PBI per cápita tiene que ir hacia ahí. ¿Cómo puede ser que se gasta tanta plata en Capital Federal por habitante?”, se preguntó Barrios, y afirmó que “estamos organizando mal la cuestión”.

“El asunto no es que sobran trabajadores, el asunto es que hay muchos que no acceden a sus derechos. Cuando cumplamos con eso vamos a generar millones de puestos de trabajo”, cerró Barrios.