Central no puede permitirse partidos de puerta giratoria… y menos en la Copa
El equipo del Kily González debe volver a ser ese de fines del semestre pasado, cuando era peligroso en un solo arco y no en los dos.
- Deportes
- Ago 10, 2021
Por Fabrizio Turturici
Central no puede permitirse partidos de puerta giratoria… y menos en la Copa. El abultado 4 a 3 contra Bragantino en el Gigante de Arroyito lo deja mal parado al equipo del Kily González para la revancha en Brasil, donde deberá convertir al menos dos goles y defender de mejor forma su arco, que hoy fue vulnerado ¡cuatro veces de local!
Es cierto que tiene armas ofensivas con las que entusiasmarse, con Emiliano Vecchio dirigiendo la batuta y un Marco Ruben que demostró seguir siendo determinante y que en los partidos importantes, siempre va a estar para ponerse el equipo al hombro. Pero ya no puede desatender lo que sucede del otro lado de la cancha.
Desde el reinicio de la competencia el sistema defensivo fue de mal en peor, con un equipo largo en el retroceso y con agujeros por todos lados, agujeros que esta noche fueron aprovechados por la gran figura Artur, que sumó una asistencia para Praxedes y marcó su triple personal demostrando la gran contundencia del elenco brasileño.
Al cabo de la primera parte se advertía una enorme diferencia en la parte táctica y técnica, por lo que la eliminación parecía un hecho consumado. Sin embargo, con el camino de su goleador MR9 y con más corazón que fútbol, el cuadro rosarino logró enderezar la historia y aspirar -¿por qué no?- a soñar con la clasificación a las semifinales.
La estrategia auriazul no fue muy distinta a la que venía desplegando en el plano local, con Vecchio recostándose atrás para el armado de juego, la explotación de las bandas con la trepada de los laterales y un gran esfuerzo permanente de los puntas. Pero atrás jugó a la lotería con ese «triángulo de las Bermudas» que formaron el 5 y los zagueros.
Todos los espacios fueron capitalizados por un rival decisivo que no dejó pasar una y que llega a la revancha con la comodidad del resultado. Por el lado de Central, solo queda cambiar la página e intentar volver a ser ese equipo hacia fines del semestre pasado, cuando era peligroso en un solo arco y no en los dos. El sueño y el material está.