Vecinos de Fisherton se manifestaron para pedir seguridad ante una ola de entraderas

Nuevamente la inseguridad está en el ojo de la tormenta, sumado al asesinato de un joven para robarle el auto en barrio Arroyito, se suma un pedido de los vecinos de barrio Fisherton ante una ola de entraderas a comercios y viviendas en la zona de Eva Perón al 8000.

Vecinos de la zona de Fisherton se movilizaron este mediodía para pedir presencia policial, ya que «no hay un solo comercio que no haya sido robado», expresó Jésica, una vecina que sufrió cinco intentos de entraderas en su vivienda, a la vez que expresó: «Nos juntamos para pedir seguridad, hace tres meses que tuve cinco intentos de entraderas en mi casa. La última fue en el techo antenoche en el ventanal de mi casa me estaban observando a las 2.30 de la madrugada. Tuve que llamar a la policía».

Al mismo tiempo dijo que fue necesario organizarse como sociedad: «Hicimos un grupo de vecinos de la cuadra y de comerciantes. No hay uno que no haya sido robado, no hay uno que no hayan ingresado a las casas o a las terrazas. Puse alarmas, cámaras, rejas, me gasté una fortuna de plata que no tenía, porque tuve que pedir prestada y siguen entrando igual, por las casas de al lado, por un terreno baldío que tengo al lado que es un aguantadero».

En ese sentido, Jesica aseguró que «nos sentimos desamparados. El intendente y el gobernador tienen que renunciar porque no sirven».

«Todo lo que es Eva Perón al 8000, hay cualquier cantidad de comercios, a todos les robaron. Al bar le hicieron un boquete en el techo, a la carnicería también y no vienen porque tienen miedo», se resignó.

Por otra parte apuntó que «la responsabilidad es de la parte política, la policía recibe órdenes, fui al Centro de Justicia Penal,  a Tribunales, a Jefatura, a la comisaría 17ª, al Centro Territorial de Denuncias y me siguen mandando de acá para allá, se tiran la pelota. Pedí un móvil fijo para la cuadra porque un día a las 5.30 de la mañana me estaban tumbando la puerta, salió mi pareja lo agarró pero se escapó, y por suerte no estaba armado».

«Pedimos cámaras y no están activadas, la policía la única solución que me dio es que me compre un arma, vaya al Renar haga los papeles para la tenencia que corresponde», indicó la vecina.

Ante los reiterados hechos de inseguridad, la vecina manifestó que «siento que estoy sola, tengo un hijo de 7 años y cuando entraron a mi casa lloraba y yo diciéndole que se meta abajo de la cama  y ahora está con psicólogo».

Otro vecino dijo: «Estoy acá porque siempre estuve comprometido con los vecinos. El barrio está dividido por calle Tucumán, hacia el norte pertenece a la 17ª y hacia el sur a la sub 22ª que es un kiosco y la 17ª nunca sirvió para nada. Pero la culpa de esto la tiene el gobernador porque en la campaña decía que iba a ser jefe de la policía, que todo lo que estaban haciendo antes estaba mal».

Además se quejó de los sueldos de los jueces «¿para que cobran 400 o 500 mil pesos?, yo como jubilado que trabajé toda la vida cobro 30 lucas y ellos agarran (a los delincuentes) y los largan al otro día. Que me expliquen».

En el mismo sentido, apuntó a la llegada de los agentes de las fuerzas federales, al indicar que «ahora trajeron 500 gendarmes, ¿alguien los contó? Acá en el barrio no se ven, pero están abajo del puente y agarran al tipo que va a laburar. Acá en el medio del barrio chorean, no abajo del puente. Es una mentira», concluyó.