Por la pandemia, el Vaticano proyecta para 2022 el «mínimo histórico» de gastos operativos
Según el español jesuita español a cargo de la economía vaticana, Juan Antonio Guerrero Alves, “este año los gastos de la curia alcanzan un nuevo mínimo histórico al presupuestar 289 millones de euros frente a los 293 millones del año pasado",
- Religión y espiritualidad
- Ene 28, 2022
El Vaticano anunció que para 2022 proyecta el «mínimo histórico» de sus gastos operativos a causa de la baja en sus ingresos causados por la pandemia de coronavirus.
«Este año los gastos de la curia alcanzan un nuevo mínimo histórico al presupuestar 289 millones de euros frente a los 293 millones del año pasado», anunció este viernes el secretario de Economía de la Santa Sede, el español Juan Antonio Guerrero Alves.
Según el jesuita a cargo de la economía vaticana, la decisión de rebajar los gastos de los 60 entes principales del Vaticano contemplados en el Presupuesto para este año se da porque «los ingresos siguen más bajos que en la prepandemia».
Por otro lado, según las cifras dadas a conocer hoy por la Secretaría para la Economía, el Dicasterio de la Comunicación será el que más gaste, con 43 millones de euros, frente a los 23 de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y los 41 que consumirán todas las Nunciaturas (embajadas) que tiene en el mundo.
En líneas generales, Guerrero Alves anunció además en una nota de prensa que acompaña al Presupuesto que para 2022 el Vaticano decidió incorporar a su proyección de gastos a otros organismos que dependen de sus finanzas y no forman parte de Gobierno cotidiano de la Iglesia.
«Esto significa que hemos pasado de considerar un presupuesto en torno a los 300 millones de euros a uno que pasará de los 1.000 millones», detalló.
En ese marco, el jefe de las finanzas vaticanas puntualizó que, si se consideran solo los 60 entes que representan el corazón operativo de la Curia, el déficit previsto es de 45.8 millones de euros, frente a los 49,7 proyectados para el año pasado.
El objetivo trazado, según el Vaticano, es el de «contención del gasto, sin reducir la caridad del Papa, sino más bien aumentándola, con vacunas a los sin techo, aumento de ayudas a las Iglesias en necesidad», entre otras acciones.