Hay que evacuar las islas, el Paraná crecerá mucho más
De acuerdo con las proyecciones del Instituto Nacional del Agua (INA) hay tiempo de descuento para evacuar la hacienda en islas del Litoral, ya que se espera que la semana próxima se agrave la crecida del Paraná.
- Región
- Dic 25, 2015
Un informe del sitio Valor Soja indicó que «comenzó la cuenta regresiva para evacuar a la hacienda presente en la zona de islas del curso inferior del Río Paraná: en la zona entrerriana de La Paz se espera una cota de 6,30 y 6,61 metros para el próximo 28 de diciembre y 2 de enero, y actualmente se ubica en 6,04 metros».
En el área de influencia de la ciudad de Santa Fe se proyecta una cota de 5.52 metros para el 28 de diciembre (hoy está en 5.08), mientras que el 2 de enero podría llegar a 5.71 metros, según un reporte difundido por el Instituto Nacional del Agua (INA).
El nivel de alerta máximo (evacuación) establecido por Prefectura Naval Argentina es de 6.15 y 5.70 metros para La Paz y Santa Fe respectivamente.
La Secretaría de Coordinación y Desarrollo Territorial del Ministerio de Agroindustria, a través de la Dirección Nacional de Emergencias y Desastres Agropecuarios, recomendó a los productores ganaderos de las zonas afectadas coordinar el uso de las balsas y barcazas con anticipación para evitar el exceso de demanda.
También, por medio de un comunicado, aconsejó priorizar el destino de vientres, terneros y categorías en proceso de terminación a campos receptores para el sostenimiento de la capacidad de producción.
Además dijo que era conveniente apresurar las ventas de los animales avanzados en el proceso de terminación y además se abrió una línea de comunicación directa para consultas: [email protected]
Parte de la hacienda presente en las zonas afectadas ya fue trasladadas a tierra: «En algunos casos la producción de carne en islas se complementa con campos en tierra firme o corrales de engorde, en tales situaciones la colocación de la hacienda retirada está asegurada», aseguró Valor Soja.
Pero algunos empresarios agropecuarios o inversores mantienen hacienda en islas sin un reaseguro terrestre, con lo cual, ante una crecida, están obligados a recurrir a un corral de engorde (hotelería) o bien a vender, a cualquier precio, la hacienda retirada.