Instituciones y prestadores que atienden a personas con discapacidad reclamaron en el Monumento
Durante la protesta, referentes del sector se quejaron porque “no se está cumpliendo con la Ley Nacional de Discapacidad”. Le dijeron a Conclusión que el aumento otorgado por el nomenclador nacional de un 35% en dos pagos “parece una tomada de pelo”.
Instituciones y prestadores que atienden a personas con discapacidad se manifestaron frente al Monumento a la Bandera para reclamar por los aranceles dispuestos por el nomenclador nacional a los que consideran insuficientes.
Durante la actividad los manifestantes aseguraron que no pueden “solventar los costos de vida” y le dijeron a Conclusión que están “cansados” y que no pueden “seguir de esta manera porque no se está cumpliendo con la Ley Nacional de Discapacidad 24.901”.
En la misma “se sostiene que se debe cumplir con la asistencia, los tratamientos, la prevención de personas con discapacidad que incluye todo lo que es equipamiento que ellos necesitan, desde una silla postural hasta pañales”, especificó la prestadora Daiana Oddo.
“A las obras sociales no hay nadie que las regule por eso tardan muchísimo, está todo desregulado, los aranceles quedaron súper atrás en cuanto a la inflación y ya se está haciendo insostenible”, agregó la referente.
Enseguida describió que el último aumento de 35 por ciento desdoblado en dos pagos “parece una tomada de pelo en el Boletín Oficial de la República Argentina, es mínimo comparado con los que otras profesiones y otros trabajadores están cobrando que es un 60, un 70 por ciento”.
“Más allá de lo que cobremos o no – prosiguió Oddo – queremos destacar que esta es una lucha por los derechos de las personas con discapacidad, porque nosotros hoy estamos en lo profesional y mañana no sabemos si vamos a estar o no. Pero las familias con personitas con discapacidad siguen estando y siguen vulnerando sus derechos e invisibilizando, inclusive en el censo nacional de hace unos días”.
A continuación, remató: “Seguimos siendo un colectivo invisible, esto es histórico, la discapacidad siempre fue invisible para el Estado, nosotros pedimos que el Estado completo se comprometa con este colectivo”.
A su turno, otra de las manifestantes, la psicopedagoga Cristina Recabarren Lagos planteó que lo que ganan “es mínimo” y que “con 250 pesos la hora” no les alcanza “ni para comprar una Coca Cola”.
“Necesitamos que vean que somos personas dignas y que necesitamos comer también, amamos lo que hacemos y entonces queremos seguir brindándole al paciente una prestación de calidad”, subrayó.
Finalmente, Recabarren Lagos expuso: “Esta marcha se está replicando en muchas provincias de la Argentina, incluso en CABA, donde se está presentando un petitorio para que nos atienda el Presidente de la Nación”.