El festival de artes escénicas contemporáneas El Cruce comenzó a puro baile
Con mucha expectativa y con muchas ganas comenzó un evento muy esperado por bailarines y bailarinas de la ciudad que se extenderá hasta el 12 de noviembre con una grilla muy completa y variada.
El Festival Internacional de Artes Escénicas Contemporáneas El Cruce organizado desde hace 20 años por la Asociación de Coreógrafos, Bailarines e Investigadores en el Movimiento y Expresión Corporal Independiente de Rosario (COBAI) comenzó en Rosario.
El acto de apertura se realizó en el espacio autogestivo Micelio, con una intervención performática del Elenco de Danza Contemporánea del Instituto Isabel Taboga y la presentación de la novedosa obra «¿Cómo las cosas llegaron hasta aquí?» del talentoso artista performer platense, Iván Haidar.
En esta nueva edición, la mirada de creadores y hacedores locales e internacionales intentará construir el paisaje escénico de las obras e intervenciones, seminarios y proyecciones de videodanza.
Conclusión dialogó con Verónica Rodríguez, una de las organizadoras de este masivo festival, quien contó que «después de dos años largos de hacerlo pero de un modo restrictivo, este año dijimos vamos con todo, estamos muy felices de muchos días de festival y dándole participación a la mayoría de la gente que baila en la ciudad».
La integrante de la coordinación del festival internacional, mencionó que el mismo va a tener la participación de «los elencos de los elencos de la escuela Isabel Taboga, la Nigelia Solia, escuelas privadas, las compañías también que se dedican profesionalmente a crear obras. Vamos a tener un pantallazo muy diverso, con visitas nacionales e internacionales».
Rodríguez detalló que en Rosario «se baila mucho y quizás no hay tantos espacios para que se vea. Es importante generar un festival que contenga a todos».
El festival El Cruce resulta de total relevancia para la ciudad. «Un festival es un intercambio también no es solo mostrar sino que te vea. Esto es un espacio de formación también. El festival es muy amplio y muy rico en ese sentido. Hace que el artista local se muestre, vea otra producción y sea mirado por otros. El arte se nutre de esta manera».
«Toda la gente que está, está muy contenta y expectante. Vamos charlando y haciendo conversatorios. Viene una súper fiesta y es un momento hermoso en el festival. Hay arte por todos lados», concluyó la organizadora.