Confundió un cocodrilo real con uno de plástico y le mordió el brazo
El trágico hecho sucedió en la ciudad de Cagayán de Oro, Filipinas en la atracción Amaya View. Una persona se quiso sacar una selfie con un cocodrilo que pensaba era de plástico. Ocurrió lo peor. Mirá el video.
Ya se ha visto en varias oportunidades como las personas, por querer sacarse una selfie distinta, tienen graves accidentes o directamente la muerte.
En esta ocasión, un hombre filipino que visitaba un parque temático se encuentra gravemente herido tras confundir a un cocodrilo con un modelo de plástico.
Tal y como han explicado varios medios locales, Nehemias Chipada, de 68 años, estaba visitando el parque de atracciones Amaya View en la ciudad de Cagayán de Oro, Filipinas, el 10 de noviembre cuando vio lo que pensó que era un modelo de lo más realista de un cocodrilo.
El hecho comenzó cuando Chipada le pareció que el cocodrilo estaba tan bien diseñado que se bajó a la piscina donde estaba esta “réplica” para hacerse un selfie. El hombre estaba celebrando su cumpleaños con la familia y, al bajar, incluso le dio varios golpecitos en la cabeza. Sin embargo, esta réplica enorme era un cocodrilo real; y cuando el hombre estaba demasiado cerca, el animal le atacó hundiendo sus dientes en el brazo.
Se puede ver claramente en el video como acontecieron los hechos:
Afortunadamente, pudo liberarse de las mandíbulas del cocodrilo antes de que pudiera arrancarle el brazo, pero sufrió heridas que requirieron atención médica urgente. En el mismo parque se le practicaron primeros auxilios antes de que una ambulancia lo llevara al hospital, donde se sometió a múltiples cirugías.
Te puede interesar: Estas abejas cambiaron el polen por carne podrida
Según fuentes del centro, el hombre sufrió fracturas de huesos y ocho heridas en el brazo y muslo que requirieron suturas. Además, le encontraron un colmillo del cocodrilo enterrado en el brazo.
Por su parte, el parque ha acordado cubrir los costes del tratamiento de Nehemias, aunque un portavoz ha negado que hubieran sido negligentes al prevenir el terrible accidente, alegando que el área donde ocurrió el ataque del cocodrilo estaba en realidad fuera de los límites del público, “esa área en realidad está restringida. Hay letreros y recordatorios constantes de nuestros guías turísticos “, zanjó la directora de operaciones de Amaya View, Candy Unabia.