Murió George Romero, director de “La noche de los muertos vivos”
De origen cubano y lituano, fue uno de los directores más seguidos por los amantes de los géneros de terror y fantástico, ya que fue autor de impresionantes relatos acerca de “zombies” que devinieron clásicos y generaron un sinnúmero de clones en todo el mundo.
- Espectáculos
- Jul 16, 2017
Hoy, a los 77 años, murió el director de cine estadounidense George (Andrew) Romero, autor de clásicos de terror como “La noche de los muertos vivos” y “El amanecer de los muertos”, tras una “breve y agresiva batalla contra el cáncer de pulmón”, según informó hoy el productor Peter Grunwald al Los Angeles Times.
De origen cubano y lituano, Romero fue uno de los directores más seguidos por los amantes de los géneros de terror y fantástico, ya que fue autor de impresionantes relatos acerca de “zombies” (“muertos vivientes”) que devinieron clásicos y generaron no solo secuelas sino además un sinnúmero de clones en todo el mundo.
El cineasta falleció mientras escuchaba la música de una de sus películas favoritas, “El hombre quieto” (1952), clásico de John Ford, con John Wayne, compuesta por Víctor Young y Richard Farrely, junto a su esposa, Suzanne, y su hija, Tina, según comentaron sus familiares
Nacido en 1940 en el Bronx, Romero debutó con el largometraje “La noche de los muertos vivos” (1968), que costó 100.000 dólares, recaudó 30 millones y años después se convirtió en un clásico de culto, con una remake de Tom Savini en 1998, y muchas falsificaciones.
Una década después llegarían “There’s Always Vanilla” (1971),“Hungry Wives” (1972), y “The Crazies” (1973), cuando abrió un paréntesis para trabajar en series de televisión, “Martin, el amante del terror” (1978) y “El amanecer de los muertos” (1978)
Esta última producción, la secuela de su ópera prima, “La noche de los muertos vivos”, con presupuesto de 650.000 dólares marcó un nuevo pico de éxito del “autor”, dando ganancias por 55 millones de la misma moneda, y le permitió volver al primer plano.
Más tarde llegarían “Knightriders” (1981), otro taquillazo como “Creepshow: El festín del terror” (1982), y la tercera de la saga con zombies “El día de los muertos” (1985), con Lori Cordille y “Monerías diabólicas” (1988), con John Pankow y Jason Beghe.
La última etapa de su carrera como director trajo “La mitad siniestra” (1993), según el relato homónimo de Stephen King, y tres nuevas entregas de zombies, como “Tierra de los muertos” (2005), “El diario de los muertos” (2007) y “La reencarnación de los muertos” (2009).
En estos días se había puesto al frente de la producción de “Road of the Dead”, de Matt Birman, también con muertos vivos como eje de la trama.