Un grupo de jóvenes derriba prejuicios y estereotipos desde el trabajo social
Pagaron sus condenas con la privación de su libertad, hoy colaboran con una olla popular en Barrio Godoy, con la intención de consolidar sus sueños de libertad. Historias atravesadas por el dolor, la soledad, y una profunda reflexión sobre lo que se necesita para que el castigo no sea un estigma que los acompañe de por vida.