Aislados en el fondo: cuando el hambre golpea la puerta y comer también es salud
La realidad que parece comenzar a reflejarse en las barriadas rosarinas, como consecuencia del parate inevitable de la actividad económica (formal o informal) derivada del necesario aislamiento, resulta desesperante y no hay tiempo para llenar formularios. Desde el municipio por ahora se concentran en gestionar el alimento pero, según dicen, nadie estaba preparado para esto.