Hacia fines del siglo XIX, y gracias a la llegada de inmigrantes italianos, Rosario se convirtió en una de las mayores ciudades productoras de pan dulce. Para la década de 1920, la producción de este clásico navideño alcanzó su punto más alto, exportando los productos a otras localidades.
Los productos que menos aumentaron fueron turrón de maní (72%), budín sin frutas (108%) y la sidra (116 %), según un estudio de la consultora Focus Market.
En la Ciudad de Buenos Aires el kilo de pan dulce artesanal tradicional tendrá un costo de $3.800, mientras que los producidos por marcas de consumo masivo -ya sean de fruta o de chocolate- oscilarán entre los $700 y los $1.200.
La producción se realizará en dos mil panaderías y puntos móviles de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Catamarca, Salta, Tucumán, Jujuy, Misiones y Santa Cruz.
