Los trabajadores vinculados a las áreas de iluminación y de diseño de vestuario, acordaron subas del 7, 4 y 3,5 % a lo largo de tres años y que ningún empleado sea desplazado por la utilización de la nueva tecnología.
“Estas empresas se niegan a proteger a los artistas para que no sean reemplazados por la inteligencia artificial, se niegan a aumentar sus salarios para mantenerse al día con la inflación y se niegan a compartir una pequeña porción de los inmensos ingresos que su trabajo les genera”, denunciaron desde el sindicato de actores.
