La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA) llevaron a cabo asambleas sorpresivas en los aeropuertos de Ezeiza y de Aeroparque en reclamo de los despidos que se vienen sucediendo y en rechazo de la eventual privatización de Aerolíneas Argentinas.

Además, desde las organizaciones sindicales hicieron saber que el pago de la paritaria 2023 aún está inconcluso y que los salarios de los trabajadores del sector están un 65 % por debajo de la inflación.

La medida duró unas dos horas y por ello se produjeron cancelaciones, demoras y desvíos en ambas estaciones aéreas, como así también en aeropuertos de todo el país que se sumaron a la medida.

La entidad gremial que encabeza la realización de este tipo de asambleas es APLA que después de haber originado el 29 de junio esta modalidad de protesta, tiene prevista su continuidad hasta el 7 de este mes.

Mientras los empleados se encuentran trabajando “a reglamento”, fuentes de Aerolíneas Argentinas le dijeron a Infobae que la compañía “está operando normalmente, con un 96 % de puntualidad”.

Por su parte, trabajadores de Intercargo, quienes prestan servicio de rampa a casi todas las compañías aéreas, con excepción de Aerolíneas Argentinas, American Airlines y Flybondi, también realizan medidas de fuerza.

Además, la empresa Flybondi justificó la demora de sus vuelos: “Trabajadores de la empresa Intercargo realizan una medida de fuerza gremial que afecta nuestro servicio. Por ese motivo nos vimos obligados a modificar los aeropuertos de salida y arribo de algunos de nuestros vuelos”.

“Lamentamos las molestias ocasionadas por esta medida que se toma de manera sorpresiva y sin la más mínima consideración hacia el pasajero”, concluyeron.