La Corriente Federal se reunió con monseñor Lozano y marchará a San Cayetano
El encuentro tuvo lugar este viernes, donde gremialistas y el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social plantearon la "grave situación de deterioro económico y social del país". En ese sentido, se convocó a una movilización hacia la parroquia para el 7 de agosto.
Este viernes la Corriente Federal se reunió junto con el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, para analizar la «grave situación de deterioro económico y social que atraviesa el país. En ese sentido, se convocó a una movilización para el 7 de agosto hacia la parroquia de San Cayetano en reclamo de «trabajo diario».
El encuentro tuvo lugar en la sede episcopal ubicada en Suipacha al 1.000, Capital Federal. En este se hicieron presentes, además de monseñor, Héctor Amichetti, Horacio Ghilini, Eduardo Berrozpe, Carlos Minucci, Horacio Arreceygor, Vicente Fabbro, y Rúben Lafuente. Los dirigentes de la Corriente Federal, responsabilizaron por la situación que transitan los argentinos, al gobierno nacional y sus correspondientes políticas económicas.
«Despidos, suspensiones, cierre de empresas, caída de la producción, crecimiento del desempleo y pobreza es la realidad, mientras se anuncian mayores ajustes para sostener un esquema económico insustentable, que exige un gran endeudamiento que compromete el presente y futuro de la sociedad. Para sostenerlo y beneficiar a los ricos, se impulsa el ajuste sobre trabajadores y pobres, y se intenta la flexibilización laboral, la degradación de la legislación del trabajo y de la protección social», destaca el documento que la Corriente hizo conocer.
En ese sentido, Sergio Palazzo, quien encabeza el sindicato de bancarios, aseguró que «mientras se agrede desde el propio Ejecutivo al movimiento sindical argentino. El gobierno también decidió confrontar con la mayoría de la sociedad y destruir todas las instancias de diálogo que propuso de manera falsa».
De esta manera, dirigentes gremiales ratificaron que «sin trabajo digno para todos, no hay ciudadanía y democracia reales», razón por la que se convocó a toda la ciudadanía a hacerse presentes en la movilización del 7 de agosto hacia la Basilica de San Cayetano para reclamar por el «trabajo diario».