LUNES, 18 DE NOV

La crisis se profundiza sin distinción de actividades

Las medidas económicas del gobierno de Cambiemos afectan a vastos sectores de trabajadores. Pedidos de quiebra, despidos de personal, paralización de la producción, etc., se conjugan a lo ancho y largo del país.

La tremenda crisis económica que afecta a numerosos sectores del trabajo no da tregua y se profundiza cada día, sin distinción de rubros ni geografías.

En estos días han salido a la luz cuatro nuevos casos resonantes: los 47 operarios del molino cordobés Excelsior llevan 7 meses sin cobrar, la textil Australtex ratificó los 30 despidos, Paquetá, industria del calzado de Chivilcoy, está al borde del abismo y Cereales 3 Arroyos sigue sin pagar salarios.

Preocupación en Morteros

El molino harinero Excelsior, de la localidad cordobesa de Morteros, dejó de pagar salarios y sus 47 empleados reclaman que les garanticen las fuentes de trabajo.

La empresa es propiedad de Ernesto C. Boero S.A., y sus trabajadores llevan adelante una vigilia en demanda de que la nueva compañía que se hará cargo del molino garantice los puestos de trabajo y el propietario original abone las indemnizaciones que se habían acordado luego de la quiebra.

El gremio consideró, además, que existe una actitud sospechosa de la Justicia a partir de la emisión de resoluciones contradictorias.

Los operarios demandan también el pago de salarios adeudados de los últimos siete meses.

Participación de la Uoma

La medida comenzó con la intervención de la Unión Obrera Molinera Argentina (UOMA) a nivel nacional y cuenta con el acompañamiento de las seccionales de las provincias de Córdoba y Santa Fe.

Se solidarizaron la CGT Regional San Francisco, las 62 Organizaciones Gremiales Peronistas, la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba tanto a nivel local, como departamental y provincial, la Asociación del Personal de los Organismos de Previsión Social, el Sindicato Argentino de Televisión, y la Unión Obrera Gráfica de Córdoba.

El Secretario General de UOMA Morteros, Lucas Zurita, afirmó que en todo este tiempo no recibieron ayuda del municipio como tampoco de la provincia. “Estamos subsistiendo como podemos, trabajando en changas, el sindicato nos otorga alguna ayuda económica y la obra social nos mantiene la totalidad de las prestaciones, pero no recibimos apoyo hasta ahora de nadie”.

Los trabajadores adelantaron que no dejaran que el personal o directivos de la empresa El Manglar, que alquiló el molino, ingresen a las instalaciones hasta que no cobren el 100 % de las indemnizaciones que les corresponden, las vacaciones y los salarios adeudados.

Despidos en el sur

Por otro lado, la textil Australtex, de Tierra del Fuego, ratificó los 30 despidos y culpó a las importaciones y a la caída de la demanda por la situación que vive. Desde el gremio textil pidieron que se paguen las indemnizaciones completas.

Así lo aseguró Rogelio Sager, secretario general de la Asociación Obrera Textil fueguina, quien además detalló que despiden a 30 trabajadores “aduciendo que no hay trabajo”.

En diálogo con la radio local Aire Libre, el dirigente gremial indicó que, “hay una realidad en todo el país y los textiles venimos muy castigados” y confirmó que, en la audiencia celebrada en la jornada del lunes, “la empresa ratificó los despidos”.

Sager manifestó que, “en seis meses es impresionante como se vino abajo la productividad” y que las autoridades de la firma explican que esto se debe, “a la importación, la recesión económica y están súper estoqueados”.

Si bien desde el gremio, “planteamos la continuidad laboral” desde la empresa, “se cerraron y dijeron que no. Ahora van a pagar la indemnización completa”.

Por último, describió que, “todas las textiles están con baja producción, es impresionante lo que está pasando, tenemos bajas en todos lados. Fabrisur es la única que aún no hay gente suspendida, están trabajando a un 60 %”.

El rubro del calzado

Asimismo, la crisis en la industria del calzado no cesa y Paquetá está al borde del abismo. La empresa, radicada en Chivilcoy, cuenta con trabajo para 15 días. Adidas, principal cliente, le retiró los pedidos y los 647 empleados temen que se encamine hacia el cierre definitivo.

La continuidad de la fuente laboral es incierta, ya que en la empresa ubicada en el Parque Industrial de dicha ciudad habría trabajo para sólo 15 días más, cuando antes se planificaban trabajos con seis meses de antelación.

A raíz de esta situación crítica, fuentes confiables indicaron al portal La Razón de Chivilcoy que se están llevando a cabo reuniones entre el secretario de Interior de la Nación, Sebastián García De Luca; el delegado de Ministerio de Trabajo, doctor Santiago Bertone; y el concejal del Cambiemos, José Ferro, pero en definitiva depende de la firma Adidas que habría dejado de hacer pedidos a Paquetá.

Este cese de pedidos lo saben los empleados. Desde hace un par de meses la situación de Paquetá comenzó a ser compleja, por lo que el Estado ha puesto a disposición de la empresa todas las herramientas posibles para afrontar la situación de crisis. A principios de 2018, a través del Ministerio de Trabajo, otorgó REPRO que cubría un porcentaje del salario de los trabajadores y la empresa lo rechazó.

Sin producción y sin pagos

En otra localidad también de la provincia de Buenos Aires, hay incertidumbre en Cereales 3 Arroyos, ubicada en Pilar, que paralizó la producción y sigue sin pagar salarios

La empresa está parada hace dos meses y los operarios hace dos quincenas que no cobran. Son más de 150 personas que temen quedarse sin empleo.

Pero, además, los trabajadores no cobran el sueldo y desde el Ministerio de Trabajo no ofrecen opciones que garanticen la continuidad laboral. Desde la empresa aseguran que la crisis financiera los dejó sin acceso al crédito.

“La situación es agobiante”, dijo el referente gremial del Sindicato de la Alimentación (STIA), Juan D’Annunzio.

La empresa 3 Arroyos SA, abocada a la producción de cereales para desayuno y avena arroyada cuenta con dos plantas en la localidad de Tres Arroyos y una en Pilar, y desde hace unos dos meses no produce nada.

Desde el sindicato manifestaron que “la empresa se quedó sin insumos y supuestamente sin dinero para comprar los mismos”.

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