Al silencio de la justicia se le oponen nuestras voces

Por Gisela Gentile

El femicidio de Julieta Delpino marcó un quiebre e instó a miles de mujeres en redes sociales a reclamar justicia y tratar de visibilizar, en época de pandemia, una situación realmente alarmante. Una joven de 19 años oriunda de Berabevú que fue asesinada y enterrada en el propio patio de su femicida.

La pequeña localidad santafesina se vio conmocionada ante este violento crimen de odio a manos de un sujeto que acosaba de manera incesante y sistemática a Julieta, y a otras chicas del lugar. Comprendiendo que la violencia machista se encuentra arraigada en una sociedad patriarcal que no distingue de clases y lugares.   

Según los datos suministrados por las organizaciones Mumala y La Casa del Encuentro, Delpino se convirtió en la víctima de femicidio número 107 en lo que va del año, y la 72 desde el inicio de las medidas de aislamiento obligatorio por la pandemia de Covid-19. El asesinato de Julieta vino a engrosar una estadística espeluznante que coloca a Santa Fe como la segunda provincia, luego de Buenos Aires, con más femicidios con un total de 9.

Los números resultan fríos, pero son una realidad demoledora que nos coloca a las mujeres en el peor de los lugares, presas de un machismo voraz que sale a cazarnos día tras día con el aval de un estado que mira atónito como pasamos a engrosar una miserable estadística.

Si bien la pandemia dificulta las diferentes expresiones y movilizaciones, un grupo de mujeres y disidencias, producto del cansancio y el hartazgo, se organizaron y convocan a realizar para este viernes una concentración a las 11 en la puerta de Tribunales (Balcarce y Pellegrini).

Conclusión dialogó con la fotógrafa feminista Paula Sarkissian, una de las organizadoras del encuentro para profundizar sobre esta necesaria iniciativa. “Estamos agotadas de recibir todos los días noticias de una nueva desaparición, un nuevo femicidio, una nueva impunidad, un nuevo crimen de odio o travesticidio”, indicó.

Este aislamiento no solo no nos mejora la situación, sino que la agrava, ya que en muchos casos deja a las víctimas de violencia de género más expuestas a su agresor

Transitamos una pandemia que recrudece los casos y las denuncias de violencia machista, “este aislamiento no solo no nos mejora la situación, sino que la agrava, ya que en muchos casos deja a las víctimas de violencia de género más expuestas a su agresor”.

En este contexto, el femicidio de Julieta Delpino marcó un quiebre, “recibimos esta lamentable noticia y la reacción espontanea de la familia fue movilizar en pedido de justicia. Las personas que nos encontramos en el Monumento, nos sentimos obligadas a pensar en qué hacer, de qué  modo podíamos resistir a esta ola de violencia, dejando en claro que no nos callamos más. Somos <nosotres> quienes llevamos normalmente adelante las tareas de cuidado y estamos dispuestas a seguir llevándolas, pero cuidándonos a nosotras mismas y manteniendo vigente el reclamo”, sentenció.

La idea es estar unidas mediantes cintas, con los rostros semitapados por los tapabocas y con atuendo negro, porque nos están matando y la sensación es de luto

El llamado a una concentración en las escalinatas de Tribunales donde se impulsa a concurrir con tapabocas y respetando el distanciamiento social, con la idea de ocupar el espacio público. “Vamos a utilizar a los mismos como un instrumento escénico y perfumático. La idea es estar unidas mediantes cintas, con los rostros semitapados por los tapabocas y con atuendo negro, porque nos están matando y la sensación es de luto”.

Si bien el contexto pandémico en el cual estamos inmersos dificulta las diferentes expresiones y movilizaciones, este grupo de mujeres y disidencias creen que es fundamental alzar la voz en pos de ser escuchadas. “Porque no nos callamos más, porque exigimos justicia por Julieta DelPino y por todos los femicidios. Es necesario erradicar todo tipo de violencia machista de la cual somos víctimas, reclamando por la implementación de la emergencia en violencia de género. Sostenemos que al silencio de la justicia se le oponen nuestras voces”, concluyó.