Casi un kilómetro de cola para conseguir trabajo como guardiacárceles
Más de 1.200 jóvenes se inscribieron para aspirar a un cargo de guardias en la unidad penal de Lisandro Olmos, en La Plata. El jueves se les tomará un examen intelectual y psicológico para seleccionar a los más aptos.
- Gremiales
- Jul 29, 2019
Más de 1.200 jóvenes se inscribieron para aspirar a un cargo de guardia del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) en la unidad penal de Lisandro Olmos, en La Plata, tras una convocatoria abierta que lanzó ese organismo del gobierno provincial y que finalizó este lunes.
Desde la madrugada, los aspirantes rodearon la Unidad Penal N°1 de Lisandro Olmos, situada en 197 entre 50 y 52, en las afueras de la capital provincial, donde llegó a formarse una cola de casi un kilómetro.
El Servicio Penitenciario había lanzado una convocatoria para recibir currículums de jóvenes de entre 19 y 34 años que deseen formar parte de la institución incorporándose como guardiacárceles en la Unidad de Olmos.
Según detallaron fuentes del SPB, los interesados podían acercarse a la unidad este lunes y el martes a partir de las 7.30 y presentar su postulación, aunque por la cantidad de inscritos se resolvió cerrar hoy mismo la inscripción.
El jefe del Servicio Penitenciario, Xavier Areses, explicó que “siempre que se hace una convocatoria de este tipo estamos por encima de los mil aspirantes”, y detalló que por el momento se cubrirán un total de 50 vacantes en Olmos.
Sin embargo, el funcionario no descartó que la cantidad de puestos a ocupar pueda ampliarse para personal de otras unidades carcelarias ubicadas en la capital provincial.
“Hace más de 10 años que no hay un proceso de búsqueda y selección. Cada vez que el Servicio Penitenciario busca guardias la repercusión es enorme y siempre superamos los mil postulantes”, graficó.
La mayor parte de los jóvenes que se acercaron al Penal no contaban con un trabajo estable o estaban desempleados por lo que coincidieron en que era una buena oportunidad laboral la que se ofrecía, según un relevamiento hecho por esta agencia.
Julio, un joven del barrio de Los Hornos, explicó que llegó al penal a las 5.30 “con la esperanza de conseguir un trabajo”, aunque aclaró que “no será nada fácil porque hay muchos inscriptos”.
Cristian, del barrio Aeropuerto, relató que si bien es albañil “hace cuatro meses» que está «sin trabajo, y acá se presenta una oportunidad que te garantiza un sueldo todos los meses”.
Lo mismo opinó Rosa, de 29 años quien, detalló que hace seis años “trabajo como independiente, pero mi papá trabajó en el Servicio Penitenciario y me avisó de la inscripción. Tengo una nena de 3 años y necesito de un trabajo más estable”, precisó.
Es que según consignó el jefe del Servicio Penitenciario, el sueldo inicial de un guardia alcanza a casi 34.000 pesos mensuales, lo que explica la cantidad de aspirantes inscriptos.
Areses admitió que muchos de los aspirantes se inscriben por una necesidad de trabajo y no por vocación.
Explicó que tras la inscripción que culminó hoy, el jueves se tomará un examen intelectual “de comprensión de texto y redacción para evaluar la cultura general”, y luego se hará el examen psicológico.
Los que aprueben esos dos exámenes se someterán luego a la revisión médica y física, y a partir de allí los seleccionados deberán iniciar un curso de capacitación de alrededor de un año.
Durante los primeros dos meses se le dictan «contenidos teóricos prácticos en diversas materias tales como derechos humanos, manejo de armamentos, defensa personal” y a partir de allí pasan a hacer prácticas en el penal en el que van a desarrollar sus tareas.
Areses detalló que estos guardias cumplen tareas complementarias a los que se forman en la escuela de oficiales del Servicio Penitenciario Bonaerense, que tienen una instrucción de dos años.
Precisó que entre esas tareas complementarias se encuentra el sistema de seguridad exterior para evitar posibles fugas y el monitoreo de los talleres de los que participan los internos, que en el caso de Olmos ocupa más de 7.000 metros cuadrados.
Areses desmintió, además, que tengan prioridad para el ingreso los que cuenten con familiares en la fuerza, y aseguró que “la selección será por estricto orden de mérito”.