Día Mundial del Chocolate: el rincón rosarino que experimenta con la magia del cacao

“El chocolate genera endorfinas, da felicidad”, dijo Néstor Agostino, un barilochense que hace más de 16 años fabrica chocolates en Rosario y abrió las puertas de su negocio para contar cómo se hace esta delicia proveniente del cacao.

 

Cada 13 de septiembre, desde 1995, se celebra el Día Internacional del Chocolate, en conmemoración del nacimiento del escritor Ronald Dahl, autor de la novela “Charlie y la fábrica de chocolate”. Para celebrar la fecha, Conclusión visitó el negocio Agostino Chocolate: un lugar ubicado en pleno centro donde el cacao hace su magia e invita a los rosarinos con las más deliciosas innovaciones.

Néstor Agostino nació en la localidad rionegrina de Bariloche, pero hace dieciocho años que vive en Rosario. Como le costaba encontrar un buen chocolate en la ciudad, los sabores de su tierra natal lo impulsaron a crear su propia fábrica, que actualmente está emplazada en 3 de Febrero al 412, pero que próximamente se trasladará a Laprida y Córdoba.

Si bien Néstor dice ser “más rosarino que barilochense”, cuando hace chocolates se reencuentra con sus raíces. “Hace 16 o 17 años que estamos elaborando chocolates en la ciudad. Me gusta todo de este trabajo, te da una felicidad inconmensurable. Genera endorfinas, podés estar de mal humor y el chocolate te transforma, te da felicidad”, señaló, en diálogo con este medio.

Asimismo, observó que años atrás el rosarino compraba chocolates en el sur o en los kioscos, pero de a poco está “cambiando el paladar y se está acercando más a los que elaboramos chocolate de forma artesanal y de calidad”.

¿Cómo se fabrica el chocolate?

Agostino contó que el cacao, la materia prima con la que se hace el chocolate, se importa de países como Ecuador, Venezuela, Perú, Costa de Marfil y Ghana. “El chocolate se elabora a partir de las semillas del cacao, que se secan, se tuestan, se descascarillan y así se obtienen los famosos nibs de cacao, que tienen más de 269 propiedades”, detalló.

Y continuó: “A partir de los nibs se elabora el chocolate. Por un lado, se extrae la manteca de cacao; y por otro los sólidos, que es el cacao en polvo o licor de cacao, que no tiene nada que ver con el alcohol. A partir de ahí nace la magia del chocolate”.

Néstor explicó que el chocolate blanco se caracteriza por tener leche y azúcar, mientras que el chocolate de leche tiene más porcentaje de cacao y azúcar. “Los mejores y más recomendables medicinalmente son los que tienen cacao por arriba del 70%”, dijo el chocolatero.

En Agostino Chocolates se ofrecen productos con un 80%, 60% e incluso 35% de cacao, siendo estos últimos los más dulces del catálogo. Entre las especialidades de la casa se destaca el chocolate con sauco –una baya patagónica–, con frambuesa o rosa mosqueta. Además, el comercio tiene una línea de chocolates veganos con rosa mosqueta, naranja, pistacho y pasas de uva al ron.

“El rosarino se está animando a experimentar. Tenemos unos bombones con lavanda, otros con nibs de cacao y sal, que, como el café, potencia y resalta el sabor del chocolate”, señaló Néstor.

Por último, advirtió que el sector atraviesa una situación complicada en cuanto al precio de la materia prima: “Costa de Marfil y Ghana son los proveedores de casi el 60% de la producción mundial de chocolate, pero han tenido, por el cambio climático, una crisis significativa y por eso el aumento desmedido del precio del cacao. Hoy el kilo de chocolate cuesta $58.000”.

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