El ajuste hace estragos en el complejo científico tecnológico del país
Nueva ola de fuga de cerebros, caída fenomenal de recursos, subejecución del presupuesto, salarios más bajos de la región y desfinanciación hasta para pagar servicios, el crudo relato de 202 directores de institutos nacionales que el jueves llevan al Congreso.
¿Qué hacer frente al ajuste en ciencia y tecnología? ¿Cómo frenar la fuga de cerebros? ¿Quién se beneficia con el brutal achique del Conicet y organismos de CyT? ¿Cómo revertir la licuación de salarios y subsidios de investigación?
Con esas preguntas como dardos se promociona la Jornada con legisladores nacionales en el Congreso que se realizará este jueves con la participación de directores de investigación de ciencia y tecnología de todo el país, becarios, directores de Conicet, sindicatos y trabajadores del complejo de ciencia y tecnología.
Para ejemplificar la dimensión en la que el ajuste sumergió al sector, Alejandro Vila, director del Instituto de Biología Molecular de Rosario (IBR), lo explicó así: “Estamos hablando de situaciones como dificultades para arreglar una gotera”.
Los legisladores recibirán un documento firmado 202 directores y directoras de Unidades Ejecutoras (institutos) del Conicet que expone impacto del ajuste, advierte sobre la paralización de todo el sistema de investigación, freno a la construcción, refacción y mantenimiento de edificios, renuncia al financiamiento de proyectos, una nueva ola de fuga de cerebros, subejecución de partidas, caída de recursos para funcionamiento, depreciación de salarios (son los más bajos de la región), incumplimiento de convenios internacionales, demoras en girar subsidios (incluso de proyectos de 2016) y retención de partidas de créditos internacionales.
Tras describir ese panorama, hacen dos solicitudes básicas a los legisladores:
-Que se apruebe la Ley de Financiamiento de la Ciencia y la Tecnología que cuenta con media sanción del Senado y establece metas para elevar la inversión hasta 2030.
-Y que en la ley de Presupuesto 2019 se aumenten las partidas asignadas al sistema científico en general y al Conicet y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT). Que el presupuesto destinado al Conicet garantice un aumento de salarios para investigadores, becarios y personal de apoyo no inferior a la inflación y un aumento del 100% del presupuesto para gastos de funcionamiento respecto a lo asignado en 2018. Para ANPCyT, un aumento no inferior al 60% y tomar las medidas que eviten la subejecución del presupuesto.
“Nos dirigimos a ustedes para manifestarles nuestra profunda preocupación por la grave crisis que amenaza la supervivencia del sistema científico tecnológico argentino, y para solicitarles que adopten medidas urgentes para superarla”, comienza el documento firmado por los 202 directores.
-Conicet está al borde de la parálisis. La supervivencia de este organismo, en el que trabajan casi 10 mil investigadores, un número similar de becarios y cerca de 3 mil técnicos distribuidos en más de 250 Institutos ubicados en 22 provincias del país, está en riesgo. De no tomarse medidas urgentes, el deterioro provocará la destrucción de grupos de trabajo, la paralización de instrumental muy valioso y el éxodo de científicos, dilapidando la inversión que nuestro país realizó a lo largo de muchos años.
-En lo que va de 2018 los Institutos no cuentan aún con un presupuesto aprobado por el Directorio del Conicet
-Los Institutos recibieron en cuentagotas en 2018 cuotas presupuestarias con una reducción nominal significativa respecto a los montos recibidos en 2017. No alcanza para pagar servicios públicos, garantizar la limpieza y seguridad de las instalaciones ni para realizar reparaciones y mantenimiento básico de equipos científicos.
-Los salarios de los Investigadores y Becarios son los más bajos de toda nuestra región geográfica. Con estipendios inferiores a los 24 mil pesos para becarios postdoctorales (son graduados universitarias con dedicación exclusiva, alto nivel de especialización y seleccionadas por concursos altamente competitivos), salarios apenas mayores para investigadores jóvenes y una escala desjerarquizada para los investigadores formados, es imposible evitar un nuevo éxodo de investigadores, estimulado también por la brusca reducción para nuevos investigadores y becarios.
-Hace más de un año que no se pagan las cuotas correspondientes a Proyectos de Investigación Plurianuales (PIP). Se ha incumplido con el pago de los Proyectos de Unidades Ejecutoras (PUE), presentados en 2016 como una bandera del nuevo gobierno para encauzar las actividades del organismo. No se giran fondos para cubrir acuerdos de cooperación internacional y membresías de organizaciones científicas. No se pagan las contrapartes comprometidas para cubrir la compra de equipos y repuestos mediante acuerdos con otras instituciones.
-Conicet y Ministeriod e Ciencia y tecnología abandonaron los planes de mejoramiento de infraestructura (c0onstrucción de edificios, reparación de otros (están pendientes de ejecución 24 obras edilicias aprobadas en el país).
Con respecto a la ANPCyT, que durante los últimos 20 años concentró la mayoría del presupuesto destinado a financiar proyectos de investigación científica y tecnológica, la crisis es igualmente grave:
-Los subsidios a Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica (PICT) (integrados por investigadores, becarios y técnicos tras concurso y con duración de 3 a 4 años) “disminuyeron su poder de compra de manera estrepitosa”. Los de 2017 (aún no iniciados) perdieron la mitad y los anteriores entre 55 y 70% de poder de compra.
-En la convocatoria 2018, se eliminaron proyectos de cuatro años y se redujo “a valores irrisorios” los subsidios de proyectos trianuales. Los bajísimos niveles de financiación combinados con el incumplimiento de los plazos para el desembolso de los fondos asignados, hacen que los proyectos de investigación científica y tecnológica se vuelvan inviables en Argentina.
-La ejecución de los Proyectos para Modernización de Equipamiento (PME), cuyos resultados fueron anunciados tras una estricta evaluación en febrero de 2017, está paralizada a pesar que el dinero del préstamo BID está disponible pero Hacienda no gira las partidas
-Además de demorar injustificadamente el inicio de la ejecución de los subsidios aprobados en 2017, y de recortar los montos disponibles para la convocatoria 2018, es notoria la sub-ejecución del presupuesto de la ANPCyT. No se pagaron aún una parte de los subsidios de 2016. Por primera vez en veinte años de vida, la ANPCyT está en riesgo de ver paralizadas sus actividades.
El documento que recibirán los legisladores lleva las firma de 202 directores de institutos de investigación, el 80% del total.
