El padre de la mujer que cayó mientras practicaba parapente aseguró que el piloto no tenía licencia

El padre de Natalia Vargas, la joven que murió tras caer al vacío de un parapente en la provincia de Tucumán, dijo que el piloto no tenía licencia para volar y tampoco figura en la lista de instructores habilitados por la Federación Argentina de Vuelo Libre (FAVL).

Juan José Vargas contó que así se lo confirmó el ministro de Gobierno y Justicia de la provincia norteña, Regino Amado, durante una reunión que tuvieron en la Casa de Gobierno local.

El piloto del biplaza Ariel Salazar, que iba al mando del parapente del que cayó Natalia la semana pasada, está señalado por el padre de la joven como uno de los responsables del hecho.

En tanto, en la página oficial de la FAVL hay un listado en la que figuran los pilotos que tienen licencia a nivel nacional, pero Salazar, no aparece.

Consultado por el diario La Gaceta, Salazar dijo que él tiene el carnet, pero que no sabía por qué su nombre no está en esa lista.

Por su parte, voceros de la FAVL explicaron que uno de los motivos por el que no aparece Salazar podría ser que la página web esté desactualizada. Esta semana, el piloto había admitido que «pudo haber un error humano» y dijo que está dispuesto a asumir las consecuencias.

Además, Salazar contó que habló con el padre de Natalia y le explicó que no sabe con precisión qué fue lo que pasó, pero admitió que pudo haber ocurrido una distracción por su parte.

«La charla con el padre de Natalia fue dentro de todo tranquila. Fue una conversación necesaria para ambos. Le conté todo lo que recuerdo. Más que nada, a mí me interesa aclarar algo, porque se habló demasiado y se insistió con el tema del pánico de Natalia en el aire», comentó.

Y explicó que tras el accidente él utilizó la palabra «pánico» porque según él, «fue una forma de describir la desesperación que sintió Natalia cuando se dio cuenta de que no estaba agarrada».

El pasado viernes el Gobierno tucumano suspendió por decreto todos los vuelos comerciales biplaza, deportivos y recreativos hasta que se garanticen las medidas de seguridad para los pilotos y los pasajeros.