“El placer es un derecho sexual y por ende tiene que ver con la salud”

Por Gisela Gentile

Las mujeres tenemos el derecho de sentir placer, sin culpas ni pudores. Por ello la frase que indica que “el placer es feminista”, da un puntapié de por dónde encarar esta temática. El sistema opresor patriarcal y capitalista, la cotidianeidad, la carga que representa ser mujer y otras tantas causas, nos han llevado a relegar algo tan necesario como el goce.

En este marco, la dirección de Mujeres e Igualdad, junto con la Secretaría de Género y DDHH de la ciudad, invitan al taller virtual “¿Cómo re-habilitar el placer?” que será coordinado por Filópolis. Este necesario espacio abordará diversas ideas enmarcadas en habilitar la posibilidad de recuperar el disfrute. Dicho encuentro será el próximo jueves 19 de agosto a las 18 hs.

Una charla por demás de indispensable que invita a pensarnos y repensarnos desde otro lugar, en donde exista la autopercepción, el reconocimiento del cuerpo y registro del placer. Un taller que insta, además, a reflexionar sobre vínculos y el autocuidado feminista.

Clarisa Lis Romero, es licenciada en Psicología y especializada en sexología por FLASES (Federación Latinoamericana de Sexología y Educación Sexual) y desde hace años viene militando espacios feministas formándose académicamente en género y Derechos Humanos. En este marco, hace más de dos años fundó Filópolis, una institución de Salud, relativamente nueva, que apuesta a otro tipo de acompañamiento. “Es un Centro interdisciplinario de psicoterapia, sexualidades y salud integral que apuesta a una idea diferente. En mi experiencia personal y profesional me he encontrado con la falta de perspectiva de género y diversidad sexual en todo lo que tenga que ver con la atención en salud integral, abarcando la psicología, ginecología, entre otras especialidades”.

Filópolis consta de distintas áreas de trabajo y abordaje. “Contamos con un área clínica donde brindamos acompañamientos interdisciplinarios en temas de sexualidad, dispositivos para personas LGTBI, consejerías para resolver dudas puntuales que puedan ir surgiendo o consultas que no demanden tratamientos. Por otro lado, también hemos salido subsidiadas en la provincia de Santa Fe para una investigación que estamos llevando a cabo en torno a la salud sexual de personas con vulva”.

En torno al área académica, este espacio desarrolla dos cursos que tienen el aval de la Asociación Rosarina de Sexología destinados a la formación de los y las profesionales de la salud. “A este último punto también podríamos sumarle los dispositivos grupales como círculos de gestación o puerperio, pensados para acompañar esas etapas entre otros espacios que aún están en desarrollo”, añadió.

El taller de Re- habilitar el placer surge como una posibilidad de comenzar a pensarnos desde otro lugar. “Como feministas consideramos, que muchas veces en nuestras luchas por la equidad, en el área que sea, nos hemos adentrado en nuestras carencias y nuestras demandas. La idea es empezar a abrir una puerta desde las posibilidades que tenemos, y el placer es un derecho sexual y por ende tiene que ver con la salud. Recién en 1960 se comenzó a hablar del clítoris dentro de lo que es la sexología y a validar que el placer de la mujer no pasaba por las prácticas coitales o de penetración”.

Hablar del clítoris fue una manera de empezar a visibilizar el placer de las personas con vulva, “esto último pensándolo más allá de la satisfacción masculina. Si pensamos en la pornografía, por ejemplo, podemos ver toda una construcción en pos del placer del varón. Por ello la idea de este taller es recuperar un poco, todo lo que tiene que ver con ese placer que hemos sustituido por tareas de cuidado, comunitarias, por satisfacer a nuestras parejas, por maternar, entre otras tantas posibilidades. La idea es poder comenzar a centrarnos en cómo poder recuperar el placer dentro de lo cotidiano”, enfatizó.

Un punto importante también tiene su anclaje en aprender a poner límites. “Es una forma de autocuidado, porque a veces aún como feministas caemos en este sistema de reproducción capitalista, de pensar constantemente en <otres> quedando atrapadas nuevamente en ese mismo lugar. Por ello la idea es trabajar desde allí, el placer desde lo cotidiano, sobre vínculos sanos, el placer sexual, el autoerotismo, cómo percibimos nuestros cuerpos, aprender a percibirlos en las distintas etapas de la vida que vamos atravesando, en definitiva, habitar el propio cuerpo. Por supuesto cada una lo hará en relación a como se sienta cómoda, a su estilo personal, con la idea de aprender a conectar con el cuerpo y las sensaciones para después poder comunicar lo que necesitamos y deseamos a nuestros compañeros o compañeras sexuales”.

Será un espació muy cuidado, con la intención de que sea participativo. “Es un tema sensible que lo desarrollaremos en un espacio cuidado, lo haremos junto a dos compañeras que también son psicólogas y sexólogas que son las Licenciadas Chiara Pomba y Sofía Lola. La idea es poder acompañar a cada persona, desde lo grupal, a ese descubrimiento personal, con la intención de que a partir de ese encuentro se puedan abrir preguntas más que respuestas. Para que cada una de nosotras pueda empezar a pensarse desde otro lugar”.

Para finalizar Clarisa Lis Romero realizó una reflexión final. “Jugamos con la palabra <Re-habilitar> como una forma de pensar qué acciones concretas podemos llevar a cabo para empezar a abrir lo que tenga que ver con el placer en general. Orientado por supuesto a todo lo que tenga que ver con el placer sexual.  Sin dudas es un punto de partida para lo que serán próximos encuentros. Tenemos un gran compromiso, desde Filópolis, con las mujeres y el colectivo de la diversidad sexual para acercar un poco estas temáticas, que hoy en día son temas que hay que poner en agenda”.

María Angélica Mieres es parte de la Secretaría de Genero y DDHH de Rosario y desde dicha secretaría quisieron dejar una reflexión sobre el taller. “Desde la Dirección de Mujeres e Igualdad, venimos acompañando y trabajando con las organizaciones de mujeres realizando distintos encuentros y temáticas que nos atraviesan. Este encuentro particular que tratará sobre ¿cómo habitamos el placer? surge como un tema que muchas veces las mujeres vamos postergando por diferentes situaciones”, concluyó.

Contacto para ser parte del taller: [email protected]