Fiestas electrónicas: calculan que un cuarto de los asistentes toma éxtasis
El dato fue arrojado por un estudio realizado por la Sedronar en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El mismo indica que el 71% de los jóvenes había consumido sustancias psicoactivas o pensaba consumirlas.
- Info general
- Ene 7, 2017
La muerte de dos jóvenes el fin de semana pasado en el boliche Punta Stage de Arroyo Seco abrió nuevamente el debate sobre el abuso de drogas en las fiestas electrónicas, a poco de cumplirse nueve meses de la tragedia de Time Warp. Un estudio realizado por la Sedronar encontró que el 71% de los jóvenes (75% varones y 65% mujeres) que asistían a este evento había consumido sustancias psicoactivas o pensaba consumirlas.
El trabajo realizado en CABA en 2014, pero dado a conocer recientemente, encontró que las drogas más utilizadas eran: alcohol (61%), bebidas energizantes (43%), marihuana (37%), éxtasis (26%) y, en menor medida, LSD/Alucinógenos. Lo más preocupante es que el 53% de los entrevistados las había consumido, o pensaba consumirlas, en forma combinada. Para Pablo Dragotto, director nacional de Prevención de Adicciones de la Sedronar, hay una falta de percepción del riesgo que implican las drogas.
En el caso de las sintéticas, como el éxtasis, se le suma el desconocimiento sobre sus componentes, lo que puede llevar a casos de intoxicación aguda seguida de muerte o de severo compromiso orgánico. “Lo que sabemos es que cada vez es más difícil asegurar que cuando una persona está consumiendo una pastilla, eso sea éxtasis”, explicó el funcionario. De acuerdo a los datos del Estudio sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas en las escuelas medias del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, realizado en 2015, el 4% de los estudiantes habían consumido alguna vez éxtasis. “Lo que notamos en el último tiempo es que las drogas sintéticas antes eran consumidas por un cierto sector social: clase media/alta muy ligadas a un ambiente de fiestas electrónicas. Hoy, esto tiende a diseminarse y consumirse en otros sectores y contextos más amplios”, sostuvo.
Desde la Asociación Civil Intercambios, se pidió al Estado que implemente un programas de reducción de riesgos y daños que incluya, entre otras medidas, el testeo de sustencias. Por ejemplo, en Europa en algunas fiestas y boliches se dispone de espacios donde cada persona puede llevar a analizar la droga que va a consumir. Desde la Sedronar, aclararon que esta opción no es viable en el país, “ya que el marco legal vigente no lo permite”.
“Este es una problema generalizado, por eso desde la Secretaría trabajamos en un plan que abarca todas las áreas. El abordaje debe ser integral. El análisis de pastillas es una medida más. La clave en esto es la adecuada articulación de todos los niveles de responsabilidad: el sector privado, las provincias, los municipios, las fuerzas de seguridad, etc.”, le explicó a PERFIL Dragotto.
Algunas de las estrategias de prevención en ámbitos de nocturnidad en CABA y provincias que viene llevando a cabo la Sedronar implica el control de las condiciones ambientales de las fiestas y locales bailables, el expendio libre de agua potable, el cumplimiento de las normas sobre venta de alcohol a menores, la disponibilidad de asistencia médica y la capacitación al personal. “No podemos olvidar que el mayor problema que tenemos con sustancias de abuso en los jóvenes es el alcohol, éste es el principal enfoque de nuestra campaña preventiva”.
Además, se puso en funcionamiento un Sistema de Alerta Temprana para la detección precoz de nuevas sustancias psicoactivas, drogas emergentes y nuevos patrones de consumo, del que participan también el Ministerio de Salud y Seguridad. “Además, tenemos la línea de ayuda gratuita que es el 141 que funciona en todo el país las 24 horas”, finalizó.
Emergencia nacional en adicciones
El Gobierno declaró la “Emergencia Nacional en materia de adicciones” por un plazo de dos años. La misma tiene como objetivos la “prevención y tratamiento, así como la inclusión social de aquellas personas que se encuentran afectadas por esta problemática”. La medida instruye a la Sedronar para que “elabore, ponga en vigencia e implemente acciones destinadas a hacer frente a la emergencia”. Para esto, se le asignó a la Sedronar un presupuesto para 2017 de 739 millones de pesos.
“Sumado a eso hay una partida para las Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario de 170 millones de pesos. El total implica un 63% de aumento con respecto al presupuesto anterior que era de 556 millones”, explicaron desde la secretaría. Hoy la tarea del organismo quedó circunscripta a actividades de prevención y asistencia, ya que el Registro Nacional de Precursores Químicos pasó a la órbita del Ministerio de Seguridad.
Fuente: Perfil