Rafaela: un local vendía una hamburguesa llamada «Ana Frank» y papas «Adolf»
El controversial menú se vendía en un comercio de la zona oeste de dicha localidad. Las repudiables elecciones de los nombres de los menús tuvieron un fuerte rechazo de la Asociación Cultural y Deportiva Israelita "IL Peretz". Luego del comunicado, se disculparon y los retiraron de la carta.
La hamburguesería Honky Donky, situada en patio de comida del Hipermercado Libertad, ubicado sobre la ruta nacional 34, en la zona oeste de la localidad santafesina de Rafaela optó por nombrar a sus menús con controversiales nombres como «Ana Frank», «Adolf» o «Benito». La Asociación Cultural y Deportiva Israelita “IL Peretz” repudió fuertemente la elección de la casa de comidas.
“Imaginamos que por razones de marketing y ‘picardía’, les pone a sus productos nombres de enorme eco histórico”, sentenció la entidad judía santafesina que no demoró en realizar un repudio público ante semejante situación.
En la carta del local gastronómico podía observarse una hamburguesa llamada “Ana Frank”, en referencia a la niña alemana de ascendencia judía que dio a conocer en «Diario de Ana Frank» el calvario que vivió durante la ocupación nazi a Holanda, que la obligó a ocultarse durante dos años y medio con su familia en Ámsterdam.
Además ofrecía papas «Adolf» (en referencia a Hitler) o «Benito» (por Mussolini) responsables de crímenes de lesa humanidad durante la Segunda Guerra Mundial. Mientras que el listado se completa con otras referencias a personajes públicos como «Elvis Presley», «Bob Marley», «Nostradamus», «Diego Maradona» y «Alejandro Magno».
“En ese camino, la propaganda de una hamburguesa que se llama ‘Ana Frank’ y unas papas fritas de nombre ‘Adolf’, no solo que no es graciosa ni mucho menos, sino que es agraviante, insultante, repugnante”, señaló la institución en el escrito en el cual añadió que “esta ‘pinceladita’ nazi no solo es ofensiva hacia las víctimas del genocidio racista, sino que ofende la dignidad humana”.
Luego del fuerte escrito publicado por la asociación tuvo sus frutos y llegó a los dueños del local, que rápidamente salieron a disculparse y retirar los nombres de la polémica de sus cartas. “Pedimos perdón por la ofensa y la falta de sentido de la responsabilidad por el uso indebido que remiten heridas abiertas en la Humanidad en su conjunto”, indicaron en el texto.