Cerca de 80 muertos por los bombardeos de las fuerzas sirias y su aliado ruso
Decenas de civiles murieron este viernes en las zonas rebeldes asediadas de Guta Oriental, de donde los habitantes continúan huyendo ante la devastadora ofensiva del régimen sirio y de su aliado ruso para reconquistar esta región cercana a Damasco.
- Internacionales
- Mar 16, 2018
Cerca de 80 civiles murieron este viernes en los bombardeos contra las zonas rebeldes asediadas de Guta Oriental, de donde los habitantes continúan huyendo ante la devastadora ofensiva del régimen sirio y de su aliado ruso para reconquistar esta región cercana a Damasco.
Las fuerzas del régimen recuperaron más del 70% de este último enclave rebelde objeto de una ofensiva desde el 18 de febrero. Más de 1.346 civiles, incluidos 270 niños, han muerto y miles han resultado heridos en casi un mes de bombardeos, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Pese a las condenas y llamados a un cese al fuego por parte de los países occidentales, el régimen, reforzado militarmente por Moscú, continúa su operación en este país arrasado tras siete años de una guerra que ha dejado más de 350.000 muertos.
En otro frente de esta guerra compleja, cerca de 30 civiles murieron en Afrin en bombardeos del ejército turco que busca expulsar de la región a la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG) que Ankara califica de «terrorista».
El viernes en Guta Oriental, al menos 76 habitantes murieron en los bombardeos que golpearon a las localidades de Saqba y Kfar Batna, según el último balance de la OSDH que atribuyó estos ataques a la aviación rusa.
En Kfar Batna, ocho cuerpos carbonizados yacían en el suelo en una calle, según un fotógrafo que colabora con la AFP. Algunos heridos estaban abandonados a su suerte por falta de socorristas.
Atrocidades
Ante el avance de las tropas sirias en las localidades del sur del enclave, cientos de civiles continuaron huyendo sin otra opción que trasladándose a sectores bajo control del régimen a pesar de los temores de sufrir represalias.
El jueves, al menos 20.000 habitantes salieron de Guta, especialmente de las zonas recuperadas por el régimen en el sur del enclave, según el OSDH. El embajador sirio ante la ONU, Bashar Jaafari, mencionó por su parte la cifra de 40.000 huidos.
El ejército sirio pidió este viernes a los habitantes de Guta Oriental que huyan de la zona a través de los «corredores protegidos» mientras sigue la ofensiva.
En la localidad de Adra, en territorio gubernamental al norte del enclave rebelde, unas 3.000 personas se amontonaban en una escuela transformada en un centro de acogida, según un corresponsal de la AFP en el lugar.
Para retomar la totalidad del bastión rebelde desde donde se han lanzado obuses hacia Damasco, el régimen dividió la región para aislar a los territorios y debilitar a los rebeldes evitando posibles refuerzos.
Las fuerzas del régimen retomaron este viernes el control total de la localidad de Hamuriya, un día después de una contraofensiva de rebeldes y yihadistas, según el OSDH.
«¿Hasta cuándo las potencias van a permitir esta situación?», cuestionó el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, Peter Maurer, después de haber acompañado el jueves un convoy de ayuda al enclave rebelde.
«¿Qué esperanzas pueden tener los niños que han visto familias destruidas y atrocidades?», lamentó en un comunicado.
Civiles muertos en Afrin
Gracias al apoyo militar de Rusia, el régimen de Asad ha logrado recuperar más de la mitad del territorio sirio, y no oculta su determinación en reconquistar la integralidad de este país fraccionado.
El viernes, los ministros de Relaciones Exteriores de Rusia e Irán, aliados del régimen, se reunieron en Astaná para hablar sobre la situación en Siria con el jefe de la diplomacia de Turquía, apoyo tradicional de los rebeldes.
Después de las críticas de Estados Unidos contra el papel de Moscú, acusado de ser «moralmente cómplice y responsable de las atrocidades de Asad», el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov respondió acusando a los occidentales de «preservar el potencial militar de los terroristas» en Siria.
Al menos 27 civiles, incluidos siete niños, murieron este viernes por disparos de artillería de las fuerzas turcas contra la ciudad de Afrin, informó OSDH.
Ankara desmiente apuntar a los civiles pero, según la oenegé, al menos 249 civiles, incluidos 43 niños, murieron desde el inicio de la ofensiva turca en el enclave kurdo el pasado 20 de enero.
La ciudad de Afrin ahora está virtualmente cercada, con la excepción de un solo corredor utilizado por miles de civiles que huyen hacia áreas en poder del régimen. Más de 30.000 civiles han dejado Afrin desde el miércoles, según el OSDH.