Las riquezas naturales hipotecadas para garantizar la deuda externa
En una nota de opinión escrita por el profesor titular de la Facultad de Derecho de la UBA, Eduardo Barcesat, este deja plasmado sus consideraciones y críticas con respecto al Gobierno Nacional en relación al universo de recursos naturales.
- Internacionales
- Abr 21, 2017
Con la firma del doctor Eduardo Barcesat, profesor titular consulto de la Facultad de Derecho de la UBA y directivo del Instituto Arturo E. Sampay, el portal de noticias nacionalypopular.com publica una nota de opinión acerca de lo que considera que, por decreto, el Gobierno nacional “hipotecó las riquezas naturales como garantía de la deuda externa”.
Dice el destacado constitucionalista que “no satisfecho el Presidente Mauricio Macri, con la ruinosa negociación con los fondos buitres, tal como surge del informe elaborado por los peritos de la CSJN en la causa Nº 2752/2016, informe que fuera retomado por el fiscal federal doctor Federico Delgado (26/11/2016), para solicitar las primeras indagatorias, ahora el ingeniero Macri ha profundizado el endeudamiento y la sujeción a futuro de generaciones de argentinos, al comprometer, en todos los endeudamientos pactados en el curso del año 2017 (decretos 29, 231 y sus resoluciones derivadas), como respaldo de los pagos de servicios e intereses, el conjunto de los recursos y riquezas naturales, que de conformidad con las dos cláusulas iniciales de los Pactos Internacionales de Derechos Humanos de la ONU, que integran la Ley Suprema de la Nación (art. 75, incº 22º, C.N.), son de titularidad de los pueblos; no de los Estados, ni de los Gobiernos, sino de los pueblos. Todos nosotros”, aclara Barcesat.
La inmunidad soberana del Estado
Señala a continuación la nota, que “se ha resignado, por el Gobierno de Macri, la inmunidad soberana del Estado sobre este universo de recursos y riquezas naturales, que es comprometer los inmensos yacimientos de minerales estratégicos para el desarrollo científico (sílice, litio, tungsteno, entre otros), a las resultas de una deuda pública, externa e interna, que ha crecido desaforadamente en los 16 meses del gobierno macrista (ciento diez mil millones de dólares estadounidenses)”.
Refiere luego a lo que denomina un “panorama de indudable colonialismo económico”, al que deben sumársele “dos agravantes; el primero de ellos, que junto con la concertación de deuda se ha enajenado nuestra soberanía jurisdiccional y legislativa.En efecto, se pacta la jurisdicción de tribunales extranjeros que no aplican la ley ni la doctrina argentinas, prosiguiendo así la “doctrina” Martínez de Hoz impuesta durante la dictadura cívico-militar (Art. 1º del Cód. de Procedimientos Civil y Comercial de la Nación, que no ha sido anulado ni derogado, hasta aquí).
Explica luego que “el segundo agravante es que durante el gobierno macrista, se ha incrementado notablemente la fuga de capitales desde la Argentina. Según TaxJustice Network, prestigiosa ONG especializada en el tema fuga de capitales, la Argentina lleva acumulados cuatrocientos cuarenta mil millones de dólares estadounidenses, refugiados en cuevas fiscales, al amparo de sociedades “off shore” y de legislaciones bancarias secretas; esto es, el equivalente a uno de los mejores años de producto bruto interno”.
“Patriada”
Barcesat enfatiza al señalar que “en lugar de ocuparse de repatriar esa inmensa masa de divisas, el gobierno macrista se ha encargado, solamente, de dictar una normativa exculpatoria para aquellos que sinceraron los capitales fugados, sin repatriarlos, y pagando un interés inferior al que hubiere correspondido, sin computar moratorios ni punitorios. Y todavía se congratulan de esta ‘patriada’.De allí –agrega- la pertinencia del pedido de investigación, por mal desempeño y posible comisión de delitos que se ha radicado, por un importante número de Diputados, para oportunamente formalizar el juicio político tendiente a su remoción. Debemos tener presente que el derecho del pueblo argentino, de resistir a la opresión, está consagrado por el art. 36 de la C.N”.