Agustina Rosso Sasia es la nueva presidenta de la FUR: “Tenemos que lograr que los estudiantes permanezcan en la universidad”
El pasado viernes la Federación Universitaria de Rosario (FUR) renovó a sus autoridades. La estudiante de Derecho, Agustina Rosso Sasia, fue electa como la nueva presidenta, en un difícil contexto para la educación pública argentina: a los recortes presupuestarios se suma la creciente deserción estudiantil, por los que uno de los objetivos de su mandato será crear políticas que hagan “más ameno” el paso por la universidad.
La Federación Universitaria de Rosario (FUR) renovó a sus autoridades el pasado viernes 16 de agosto: la estudiante de Derecho y representante de Reformismo en Acción, Agustina Rosso Sasia, se convirtió en la nueva presidenta del gremio estudiantil.
De las elecciones en la FUR, que son anuales, participaron delegados que representaron a las doce facultades de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). El número de estos “congresales” fue proporcional a la cantidad de estudiantes de cada casa de estudios, repartidos según los resultados de las últimas elecciones en los Centro de Estudiantes.
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En el Congreso del pasado viernes, el reformismo recibió 58 votos, mientras que el FEU obtuvo 33, el Frente Patria 17, el MNR 9 y Alternativa 1. Con estos resultados, Reformismo en Acción –espacio ligado al rector de la UNR, Franco Bartolacci– conquistó la conducción de la FUR por tercer año consecutivo: en 2022 la presidenta fue Victoria Genesini y, en 2023, Flor del Alba Cruz Valdés.
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Rosso Sasia tiene 26 años, nació en la localidad santafesina de Chañar Ladeado y a los 13 comenzó a militar en la Unión Cívica Radical (UCR). En 2017 se mudó a Rosario para estudiar una carrera universitaria y, tras un paso por Licenciatura en Estadística, en 2018 comenzó a cursar Derecho y se acercó a la agrupación política 1983, con la cual llegó a presidir el centro de estudiantes. Hoy, la joven es la flamante presidenta de la FUR y, a días de asumir, debe enfrentar un gran desafío para la educación pública: la lucha por la recomposición salarial de docentes y no docentes.
Tras una semana de inactividad en la UNR y en el marco de una huelga que se extenderá durante este martes y miércoles –donde los gremios de docentes y no docentes universitarios exigen que el Gobierno Nacional aumente los salarios–, Conclusión habló con Rosso Sasia, quien observó: “Estamos acompañando a los trabajadores porque creemos que necesitamos una salida colectiva y porque consideramos que los sueldos son indignos. Tenemos que contarle a los estudiantes el motivo del reclamo y explicarles por qué es necesario aunar fuerzas. Estamos trabajando en propuestas con los otros gremios, este lunes tuvimos asambleas en la Facultad de Arquitectura, se está haciendo una movida generalizada en las unidades académicas y a nivel nacional”.
Por lo pronto, la Federación Universitaria de Rosario acompañará el reclamo de docentes y no docentes y participará de los debates que se den sobre el tema, con el objetivo de que la situación se visibilice. Sin embargo, no tienen pensado realizar una nueva marcha como la que tuvo lugar el pasado 23 de abril en todo el país, sino que las acciones tomarán otras vías como, por ejemplo, las clases abiertas.
“Nosotros como representantes estudiantiles tenemos el deber de defender los intereses de nuestros compañeros. Entendemos la lucha docente, pero estamos en una encrucijada, por eso vamos a tratar de tener canales de diálogo con la idea de que se pierda la menor cantidad de clases posibles. Si un estudiante pierde el año, perdemos todos”, advirtió Rosso Sasia.
Los desafíos de la universidad
Al comenzar su gestión, el gobierno de Javier Milei había anunciado el congelamiento, a valores del 2023, de las partidas para las universidades nacionales. La decisión puso a las casas de estudios en un panorama crítico: ante la alta inflación, el dinero sólo parecía alcanzar para el primer cuatrimestre y la continuidad de las clases peligraba, por lo que el 23 de abril una multitud salió a las calles de todo el país para exigir una recomposición presupuestaria. Unas semanas después, desde Casa Rosada anunciaron un aumento en los fondos destinados a gastos de funcionamiento.
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Al ser consultada sobre el estado de las cuentas universitarias, la titular de la FUR indicó: “Se siguen contando los pesos para llegar a fin de mes. Si bien han llegado los fondos acordados, siempre hay un desfajase con la inflación. El desfinanciamiento de la universidad viene desde hace varios años, no solo de este Gobierno, pero la inflación que tuvimos a partir de diciembre llevó a un plazo límite”.
La joven adelantó que este miércoles representantes de la FUR viajarán a Buenos Aires para participar de una radio abierta con el objetivo de pedir que el Senado trate el proyecto de financiamiento universitario, el cual obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados la semana pasada.
Agustina Rosso Sasia, presidenta de la FUR, en las elecciones de centros de estudiantes que tuvieron lugar en abril pasado.
En relación a los desafíos que enfrenta la universidad pública, apuntó: “Lo económico atraviesa muy de lleno a los estudiantes, hay muchas familias que están bancando y por ahí no llegan a fin de mes. También tenemos que lograr la permanencia del estudiantado con políticas que hagan más ameno el paso por la universidad, y otra cuestión muy grande es lo académico, cómo lograr calidad educativa que contemple la salida laboral”.
“Tenemos que aggiornar los planes de estudio. Hoy se buscan carreras no solo más cortas, sino con otra salida laboral. Desde la Federación abogamos por crear políticas que ayuden al estudiante y que trabajen para lograr esa calidad académica que se busca”, añadió Rosso Sasia.
La estudiante de Derecho también aseguró que uno de los objetivos de quienes conducen la UNR es “buscar propuestas que inviten a las personas a ser parte de la comunidad universitaria”. En este sentido, puso como ejemplo los cursos de oficios que se dictan en los distritos de la ciudad, el avance de los cursados virtuales o la apertura de nuevas carreras que antes solo se podían estudiar en universidades privadas.
Pero a pesar de estos avances, uno de los principales problemas que enfrenta la universidad pública es la deserción estudiantil. “La cuestión económica tiene que ver, pero también los intereses de los jóvenes son otros, está el que entra totalmente convencido de que va estudiar una determinada carrera y hay otros que en el camino se dan cuenta de que no les gusta o prefieren otra cosa, también está el tema de las trabas que por ahí generan los planes de estudio”, señaló la titular de la FUR.